En la “Ciudad del Sí”, puertas cerradas para los estudiantes

Sorpresiva acción de autoridades del Ayuntamiento

Miguel Ángel Álvarez

Sorpresa causó el cierre con el enrejado de acceso a la Unidad Administrativa Municipal (UAM), el pasado 9 de enero por la mañana, cuando un grupo de jóvenes moradores de las Casas de Estudiantes José Martí (CEJM), intentaron ingresar a las oficinas del Ayuntamiento; con motivo de solicitar una explicación del por qué se sustrajo el apoyo del gobierno municipal que se destinaba para el pago de servicios de energía eléctrica, agua y gas; para el funcionamiento de las CEJM ubicado en el Jardín de Tlaxcala. Albergue, donde se hospedan un centenar de estudiantes de escasos recursos económicos en su sección femenil y varonil.

Sorpresa porque desde décadas las Casas de Estudiantes no sufrían acciones de violación a sus derechos constitucionales de petición o acciones de amedrentamiento policiaco. ¡No pueden pasar! Les gritaba el piquete de policías que se encontraba al interior de la UAM a los jóvenes que pretendían ingresar a las oficinas del Ayuntamiento.

¿Por qué el temor de los funcionarios municipales hacía los estudiantes que iban en forma pacífica a solicitar respuestas? ¿Es que de nueva cuenta se están reciclando las viejas y acedas formas de gobernar en San Luis Potosí? Como en los años 80as con gobiernos represores, como el del ex gobernador Carlos Jonguitud Barrios, que perseguía y encarcelaba a los antiguos moradores de las CEJM. O de gobiernos municipales panistas represores, como el de Mario Leal Campos y de Jorge Lozano Armengol.

Sorpresa y malestar causaron las acciones de los policías que se encontraban como cancerberos gritoneando y amedrentando a los que se acercaban al acceso a la UAM, incluso, agrediendo a personas de la tercera edad que acudían a las oficinas de Tesorería Municipal a pagar el impuesto predial de cada año. Acciones de pena ajena de una administración que se autodenomina el “Gobierno del Sí”.

Sorpresa que no hayan ido a trabajar ese día –ni tanta- funcionarios de cierta responsabilidad que pudieran atender a los jóvenes quejosos, dado en esa fecha el presidente municipal andaba de viaje en España fortaleciendo los lazos de amistad entre nuestra ciudad y las ciudades más importantes de aquel país. Y como dice el sabio refrán: “Cuando el gato no está, los ratones bailan”. No había funcionario que pudiera dar respuesta a los jóvenes, sólo el piquete de “policías”, que no podían dar alguna razón.

Sorpresa e incredibilidad manifiestan los moradores de las CEJM por el trato despótico y de odio que manifiesta la actual administración municipal hacia el albergue estudiantil, que desde hace más de tres décadas ha venido apoyando a la educación y formación de cientos de profesionistas potosinos que hoy laboran en el sector privado y público engrandeciendo a nuestra patria chica.

Sorpresa. Qué sorpresa expresan los estudiantes que a inicios de su gestión el alcalde Enrique Galindo Ceballos hizo compromisos con ellos, de que apoyaría al igual que administraciones pasadas al funcionamiento del albergue, que a falta de apoyo oficial de diversas entidades gubernamentales, se sostiene con las cooperaciones y donaciones generosas del pueblo potosino.
Vamos a casi a la mitad de la administración municipal, y esperamos no irnos de sorpresa y sorpresa por las acciones negativas de funcionarios municipales que vulneran los derechos potosinos, sobre todo, de los más pobres, como en este caso de los moradores de las CEJM o los comerciantes que trabajan en la vía pública o de quienes viven en colonias y comunidades marginadas de la zona metropolitana de San Luis Potosí, y que esperan se respeten sus derechos y atención a sus demandas del servicio de agua potable, del drenaje sanitario, de pavimentación de sus calles, alumbrado o seguridad pública. Espero que exista rectificación en la forma del ejercicio del poder y de gobernar en la ciudad por parte de las autoridades municipales. Ojalá así sea.