La carrera del CEEPAC

Jorge Camacho Peñaloza

Una campaña política es semejante a una carrera de medio fondo, una competencia de 1.500 metros, en que es tan importante la preparación física y mental del atleta como una estrategia ajustada. En el medio fondo la condición física no garantiza el triunfo sino está acompañada de la necesaria fortaleza mental que no se intimida ante el aparente vigor del adversario.

¡SIGUE NUESTRO MINUTO A MINUTO! Y ENTÉRATE DE LAS NOTICIAS MÁS RELEVANTES DEL DÍA

Además, hay que añadir en importancia la estrategia que señala los momentos en que el corredor aumenta de intensidad para probar la condición del adversario, para tantear sus cualidades. El atleta reconoce a los otros corredores y aplica de manera precisa la estrategia, modificándola en función de las circunstancias de carrera.

Las campañas se equiparan a una competencia de medio fondo. Inician con un favorito sobre el papel y unos rivales que deben estudiar tanto las características del principal adversario como de los otros. Si el equipo de campaña del candidato retador hace su tarea, pronto aparecen las debilidades del candidato que va en primer lugar.

No se trata de apabullar a los votantes denunciando esas debilidades, sino de administrarlas convenientemente para que los ciudadanos vayan perfilando la imagen del favorito en comparación con la de su principal rival. La comparación contrasta entre ambas opciones para decantarse hacia la más fiable. La fiabilidad genera confianza y simpatía. Surge de la verdad con que un candidato habla a la ciudadanía, de su cercanía al elector, de su capacidad para buscar su complicidad empujando hacia delante su proyecto de gobierno. La complicidad no es inmediata, sino que se crea con el tiempo mediante coherencia y congruencia entre palabras y acciones. Una vez que el candidato goza de la preferencia del ciudadano, que es la más relevante, inicia el esprint que deja atrás al rival y sin posibilidad de reacción.

Enrique Galindo y Sonia Mendoza disputan una carrera de medio fondo. El exalcalde que busca la reelección se dejó llevar por una supuesta campaña sucia en su contra a la que prestó una atención que no merecía. Ese gesto exhibió a un candidato descentrado, apenas ayudado por sus estrategas de campaña, que comenzó a dudar de sus posibilidades.

Sonia Mendoza priorizó sus actividades de campaña, sus encuentros con potosinos de toda clase y condición, sus discursos ajustados a las necesidades de San Luis, centrados en los problemas del agua y la seguridad.

Galindo pensó que su gestión anterior era su aval, sin considerar que en toda gestión se cometen errores que agravian a ciudadanos. Tampoco consideró que el tráfico de influencias que benefició a su hermano podría salir a la luz, restándole esa credibilidad a la que delegó su favoritismo. Su incapacidad para resolver el grave problema del agua y la inseguridad de la capital potosina terminó por diluir sus opciones puesto que sus propuestas no se corresponden con las acciones que siendo alcalde pudo llevar a término.

La carrera del CEEPAC que tuvo lugar este domingo es una metáfora precisa de la situación en la carrera por la alcaldía. En esa competencia, Sonia adelantó a Enrique y lo dejó atrás, sin oportunidad de competir. La carrera del CEEPAC es igual a la carrera por la alcaldía. Sonia Mendoza ya adelantó a Galindo en las encuestas. Ahora sólo queda que la distancia entre ambos se dé en el número de votos. Pero todo indica que Sonia ganará también la carrera hacia la alcaldía. 

*Jorge Camacho Peñaloza, periodista especialista en procesos electorales nacionales y extranjeros, deportista plusmarquista conservando récord por mas de 23 años, comentarista deportivo con Brozo en el Mañanero, director de medios de comunicación, político y excandidato a la gubernatura de Guerrero obteniendo la mayor votación por el Partido Acción Nacional, entre otros logros.