Las obras de arte del pasado ofrecen una ventana a cómo era la vida en diferentes períodos de la historia. El trabajo, la comida y la moda han cambiado drásticamente a lo largo de los años. Por ejemplo, la Belle Époque (que surgió en el siglo XIX) vio vestidos coloridos hasta el suelo y el surgimiento del arte de vanguardia, como el impresionismo .
El artista Pierre-August Renoir capturó la vida y el ocio franceses a través de su estilo aireado y femenino. Entre sus temas favoritos estaban las chicas jóvenes tocando el piano, que capturó varias veces a lo largo de su vida. Una costurera contemporánea radicada en Portland conocida como The SewLo Artist en TikTok comparte la misma pasión por la moda del siglo XIX.
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En uno de sus proyectos más recientes recreó un vestido del cuadro de Renoir con resultados impecables.
La artista SewLo , o Ivy Thompson, aprendió a hacer vestuario histórico principalmente por su cuenta, lo que incluye todo, desde confección hasta corsetería.
Descubrió que al hacer ropa podía conectarse con el pasado. La pintura impresionista de Renoir le atraía por sus cualidades identificables así como por su belleza estética. “Me inspiré en Chicas jóvenes al piano de Renoir por la sensación íntima del retrato”, dice Thompson.
“Renoir capturó una escena cómoda y cotidiana en la que dos jóvenes practicaban juntas sus lecciones de piano por la noche”.
La pintura, que data de 1889, muestra a dos mujeres jóvenes con vestidos de color naranja brillante. Uno de ellos se sienta al piano a tocar, mientras el otro está de pie a su lado, pasando las páginas del libro de partituras.
Hay una sensación de domesticidad en el interior, con un ramo colocado encima del piano y las chicas que parecen muy preocupadas por su música.
“Aunque no pude encontrar ninguna información sobre quiénes eran sus sujetos, no pude evitar sentir que los conocía”, añade Thompson.
“Se parecían a mí en muchos sentidos.
Practicando sus lecciones, pasando las tardes con una hermana. Incluso es posible que los vestidos que aparecen en el cuadro fueran hechos por ellos.
Un vestido de tarde naranja y negro confeccionado en 1889, y otro vestido naranja y negro exactamente igual que se hizo 130 años después.
Encontré algo muy atractivo en la finalización de ese círculo”.
El disfraz de Thompson es una réplica perfecta del vestido naranja que usa la joven que aparece en la pintura, con un cuello de encaje negro y ribetes negros en las mangas de tres cuartos y el dobladillo del vestido.
El corpiño es entallado, con botones en la parte delantera y polisón en la espalda.
“Muchos componentes de las prendas victorianas son muy uniformes entre prendas, por lo que una vez que has hecho uno o dos, empiezan a unirse muy rápidamente con la práctica”, comparte Thompson.
“Calculo que las prendas exteriores tardaron unas 25 horas en completarse, lo que no incluye las enaguas, el corsé y el polisón”.