¡Terrible! El ejército de Israel logró liberar la comunidad agrícola de Kfar Aza, ubicada al sur del país, sin embargo, lo que encontraron fue una escena de horror, pues hallaron los cuerpos de 40 bebés asesinados, algunos de ellos decapitados en sus cunas.
«Madres, padres, bebés, familias jóvenes asesinados en sus camas, en el comedor, en su jardín«, así fue como el general israelí, Itai Veruv, reportó la masacre ocasionada por el grupo terrorista Hamás.
Junto a los cuerpos de los bebés, yacían inertes los de sus padres, entre viviendas quemadas, muebles desperdigados y coches carbonizados. Fuentes oficiales han precisado asimismo que otros 15 menores han desaparecido y se teme que hayan corrido con la misma suerte.
«Ves a los bebés -muchos decapitados-, a las madres, a los padres, en sus dormitorios, en salas donde trataron de ponerse a resguardo y cómo los terroristas los mataron. No es una guerra, no es un campo de batalla. Es una masacre», añadió Veruv.
Por otra parte, la ganadora del Premio Nobel de la Paz en 2014, Malala Yousafzai, se refirió al conflicto entre Israel y Hamás, condenando los hechos e hizo un llamado para que la sociedad se una para pedir un «alto al fuego inmediato».
En redes sociales, expresó su preocupación por los niños que se encuentran experimentando una situación similar a la que vivió ella en su juventud.
«Nos despertamos con los sonidos de los proyectiles de mortero, vimos nuestras escuelas y mezquitas destruidas por las bombas. La paz se convirtió en algo con lo que solo podíamos soñar. La guerra nunca perdona a los niños, ni los secuestrados de sus hogares en Israel, ni los que se esconden de los ataques aéreos o sin comida y agua en Gaza», escribió.
«Hoy estoy de duelo por todos los niños y las personas que anhelan la paz y la justicia en Tierra Santa», concluyó su mensaje.
