La salud de los potosinos incierta

La salud de los potosinos incierta

Hace más de un año cuando Servicios de Salud del Gobierno del Estado (SS), tomaba medidas para contener los efectos de la pandemia del Covid-19 que se extendía por todo el planeta, la exsecretaria de Salud, y también excandidata al gobierno del estado por el partido Morena, Mónica Rangel, pronosticaba como un escenario catastrófico de 30 mil potosinos contagiados de coronavirus, y dado el escaso número de hospitales que pudieran atender a los enfermos y las camas disponibles; sería terrible. Hoy se suman más de 80 mil personas que se han contagiado, con alrededor de 1000 infectados al día, y con más de 6000 muertes. ¿Y los servicios hospitalarios? Saturados, y sin posibilidad de poder dar atención oportuna y adecuada los contagiados de esta cruel enfermedad.

Los hospitales del IMSS e ISSSTE, ya desde hace unas semanas colapsados. En Ciudad Valles, el Hospital General sin la posibilidad de poder atender a enfermos de Covid-19, igual en el Hospital de Rioverde. Solo quedan el Hospital Central y el de Soledad, para atender a los enfermos, pero ya están a punto de estar saturados.

En medio de estos males que existen para poder dar atención a los enfermos de Covid, están los otros miles de enfermos que requieren atención médica oportuna, como son los diabéticos, los que tienen problemas del cáncer o renales, quienes ante la falta de camas hospitalarias en los nosocomios para su atención e intervención quirúrgica, se pospone la entrega de medicamentos o la posible intervención médica. La señora Elizabeth Ramírez, paciente del hospital de Soledad, necesita urgentemente una operación de una hernia, dado que su estómago cada día le crece más y sus dolores aumentan día a día, desde el mes de junio del año pasado espera ser atendida, y a la fecha, los médicos de tal nosocomio no le pueden dar atención, dado que no hay camas disponibles, ni médicos ni medicamentos.

“Sólo la muerte es segura”.
Me comenta el señor Francisco Sánchez López, paciente del Hospital Central, que necesita una operación de sus arterias coronarias, antes que le pueda dar un paro cardiaco.

Desde septiembre del año pasado estoy esperando me programen una operación, pero me dicen que por el momento no se puede, porque no hay espacio en el Hospital, y me recomendó mi doctor, que acudiera a una clínica particular donde también él labora, y que el costo de la operación sería de 120 mil pesos, que es barato, pero… ¿De dónde sacó dinero?, ¡si ni trabajo tengo!

Una muestra de la ineficiencia de los servicios hospitalarios en SLP, y también de los negocios con la salud que llevan a cabo algunos galenos de los nosocomios estatales, igual que los directivos de SS, que hace unos días se dio a conocer, la compra irregular de medicamentos contra el cáncer, que eran apócrifos y también del criminal almacenamiento de toneladas de medicamentos que debieron distribuirse en todos los hospitales, clínicas y centros de salud en la entidad.
Hay más irregularidades en SS, como las denuncias que recientemente hicieron trabajadores de esta dependencia, por el despido de más de 400 entre médicos y enfermeros que se contrataron para atender las emergencias de enfermos de Covid-19, y ahora, con tales recortes, la situación de atención médica y salud de nuestros enfermos es incierta y grave. ¿Sólo la muerte es la solución? Creo que no, los potosinos nos habremos de levantar, y exigir uno de los derechos más primordiales da todo ser humano, que es el derecho a la vida.

Mis compañeros antorchistas están listos para exigir este derecho fundamental, y pronto elevarán sus voces y acciones de protesta.