Los datos del ICE generan preocupación en la Casa Blanca
Donald Trump está enojado porque los números de deportación en sus primeros días en la Casa Blanca no son tal altos como esperaba, a pesar de que los agentes del Servicio de Inmigración y Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) está llevando amplias redadas en varias ciudades de Estados Unidos.
Los arrestos y deportaciones de personas indocumentadas son más bajos de lo que ha prometido el presidente y eso lo está “volviendo loco”, dijeron tres fuentes familiarizadas con las discusiones a NBC News.
Las fuentes aseguraron que los agentes del ICE están bajo una presión creciente de la Casa Blanca.
Una fuente cercana al presidente aseguró que se está “enfadando” porque no se está deportando a más personas y que el mensaje se está transmitiendo al “zar fronterizo” Tom Homan, a la secretaria de Seguridad Nacional Kristi Noem, al subjefe de gabinete de la Casa Blanca Stephen Miller y al director interino de ICE Caleb Vitello.
“Lo está volviendo loco que no estén deportando a más personas”, dijo la persona familiarizada con el pensamiento de Trump.
El republicano ha hecho de la inmigración clandestina uno de los pilares de su campaña, al prometer que llevaría adelante la mayor deportación en la historia de Estados Unidos.
“Después de cuatro años de incompetencia y negligencia directa de la administración (de Joe) Biden, la administración Trump ha restablecido una aplicación y respeto por las leyes de inmigración de los Estados Unidos”, dijo Kush Desai, portavoz de la Casa Blanca, en un comunicado.
“Cientos de extranjeros ilegales criminales violentos, depredadores y afiliados a pandillas ya han sido reunidos y deportados por ICE desde que el presidente Trump asumió el cargo, y la administración está alineada en asegurar nuestras fronteras y garantizar que las deportaciones masivas se lleven a cabo de manera rápida y efectiva para poner a los estadounidenses y a Estados Unidos en primer lugar”, subrayó Desai.
Una fuente familiarizada con las conversaciones internas de ICE dijo que Homan tiene una conferencia telefónica diaria con agentes fronterizos en la que se sabe que expresa su frustración e “infelicidad” con los números de arrestos y deportaciones.
