La Caja del Agua es una icónica estructura ubicada en la Calzada de Guadalupe en la ciudad de San Luis Potosí, México. Declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 2010, es uno de los símbolos más representativos de la ciudad.
La historia de la Caja del Agua comienza en 1825, cuando el primer gobernador de San Luis Potosí, Ildefonso Díaz de León, encargó al arquitecto Luis Zapari una obra hidráulica significativa para la ciudad. El objetivo era crear una reserva de agua proveniente de la Sierra de San Miguelito, que llegaba a la ciudad a través de la Cañada del Lobo. Esta agua se almacenaría y distribuiría para el abastecimiento del centro histórico. La estructura fue inaugurada en 1835 y se convirtió en la principal fuente de agua de la ciudad durante un siglo.
Aunque se le había atribuido la construcción de la Caja del Agua al arquitecto Francisco Eduardo Tresguerras, la obra fue realizada por Juan N. Sanabria, con el diseño de José Guerrero Solachi. La estructura es circular, construida con cantera rosa, y está inspirada en el estilo neoclásico. Está rodeada por cuatro maceteros ornamentales, rematados por una pirámide decorativa y piñas de piedra.
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La Caja del Agua fue esencial para el abastecimiento de agua en el centro histórico de San Luis Potosí. Se dice que el agua almacenada en la Caja viajaba hasta una torre frente a la Cineteca Alameda en la Alameda Juan Sarabia, recorriendo 5,125 metros desde su origen. Además, aunque no ha sido utilizada desde 1935, la estructura aún conserva agua durante las lluvias.
A lo largo de su historia, la Caja del Agua fue la más importante de varias estructuras similares construidas en la ciudad. Aunque las otras cajas de agua se ubicaban frente a la Basílica de Guadalupe y la XII Zona Militar, la Caja del Agua se destacó como la principal fuente de agua para las familias cercanas, que compraban el agua a los aguadores que lo distribuían.
En 2017, el gobierno municipal inició la rehabilitación del parque que rodea la Caja del Agua, después de años sin renovación. Esta restauración fue parte de un proyecto mayor que incluyó la remodelación de la Calzada de Guadalupe y otros monumentos cercanos, como el Jardín Colón.
Frente a la Caja del Agua se encuentra la escultura *El Aguador*, creada por el escultor Mario Cuevas en 2009. Esta obra rinde homenaje al oficio de los aguadores, quienes en el siglo XIX abastecían de agua a las familias cercanas. Los aguadores, conocidos como *tortugos*, transportaban grandes vasijas de barro y eran figuras esenciales en la vida cotidiana de la ciudad. Durante las festividades religiosas, también se les contrataba para cargar imágenes de los santos. La escultura refleja el esfuerzo y la humildad de estos trabajadores, que a menudo gastaban lo que ganaban en las pulquerías, según las leyendas locales.
En sus orígenes, la Caja del Agua fue conocida como La Conservera. En 1835, el gobernador Reyes organizó un gran festejo para la apertura de las fuentes, donde el acto principal fue la inauguración de las “llaves de las fuentes de la Caja”. Esta celebración incluyó repiques de campanas, música, cohetes, y la distribución de la primera agua que brotó de la fuente principal. La festividad culminó con la plantación de álamos en la Calzada de Guadalupe, creando una calle arbolada que también fue bendecida en una ceremonia religiosa.
La Caja del Agua es, sin duda, un emblema de la historia hidráulica de San Luis Potosí, un logro monumental en su época y un testimonio perdurable del progreso de la ciudad.