¡Humillación total! Manchester United es goleado por Crystal Palace ¿se va Ten Hag?

El Crystal Palace ha puesto al Manchester United entre la espada y la pared y con sus opciones de estar en Europa en entredicho, tras una vergonzosa actuación en el sur de Londres en la que los de Oliver Glasner golearon por 4-0 en una clase magistral de Michael Olise y un partido desastroso de Casemiro.

El brasileño, culpable de varios goles del Palace, completó uno de sus peores partidos con la camiseta del Manchester United y salió muy marcado de Selhurst Park, un campo en el que el equipo de Erik Ten Hag se puede haber dejado sus esperanzas europeas.

A tres partidos para el final de la liga, es octavo, con las mismas unidades que el Chelsea y a dos del Newcastle United, que es sexto, la posición que da acceso a la Conference League.

Si Ten Hag tenía alguna esperanza de seguir la temporada que viene, los últimos partidos están acabando con ella y lo vivido en Selhurst Park es para que el holandés casi salga por su propia iniciativa de Old Trafford.

Porque su defensa quedó retratada ya desde el inicio de partido, cuando Olise se marchó de Eriksen, sentó en el suelo a Casemiro solo con la mirada y no tuvo ninguna oposición para llegar hasta dentro del área y batir con un tiro cruzado a André Onana.

Casemiro, que está jugando en los últimos partidos como central ante la plaga de lesionados en esa posición, vivió su primera pesadilla de la noche, pero no la última de una defensa a la que el Palace desdibujó con muchísima facilidad.

Antes del descanso, Jean-Phillipe Mateta, el gran goleador de este equipo desde que llegó Glasner, regateó con suma sencillez a Jonny Evans y clavó la pelota con un disparo brutal en el primer palo de Onana.

Ahí ya era tangible que el United se marcharía vacío de Selhurst Park. Le anularon el 1-1 a Rasmus Hojlund por una falta sobre el portero del Palace, otro a Casemiro por fuera de juego y Olise pudo haber aumentado su cuenta, con un trío de ocasiones que entre Onana y el propio Mateta desbarataron. Pero fue en la segunda parte cuando la derrota del United se convirtió en sonrojante.