Tomó una drástica decisión luego de que su hijo no le respondiera al chat de WhatsApp porque estaba “muy ocupado”

Frente a la incesante ausencia de respuestas, la mujer optó por una medida extrema y su testimonio se hizo viral

En una demostración de la tensión que a menudo se produce entre las generaciones y la tecnología, una usuaria española de TikTok, conocida como Gaorbea, compartió con sus seguidores una medida drástica que tomó con respecto a su hijo adolescente. La mujer, que vive la distancia generacional en carne propia, decidió dejar de enviarle mensajes de buenos días a su hijo, un estudiante de 15 años que reside en Estados Unidos cursando 4º año, por sus respuestas ausentes.

“Mi hijo está estudiando 4° de la ESO en EEUU y es buen estudiante y bellísima persona, pero también es muy adolescente”, dijo la mujer en su relato viral. Detalló que, pese a su habitual costumbre de enviar saludos matutinos a su hijo, resolvió no continuar con esa práctica dado el silencio por parte del joven. “Dos días después me dice que no me había leído y nadie le cree porque está todo el día con el móvil”, continuó explicando la madre en el video que ahora circula en la red social china.

La problemática expuesta no es desconocida en el ambiente familiar contemporáneo, donde la comunicación entre padres e hijos se ve frecuentemente mediada por dispositivos móviles y aplicaciones de mensajería. Gaorbea manifestó su frustración ante la actitud de su hijo y aseguró que esperará a que el joven se comunique para pedirle plata para darle una lección: “No me importa darle, pero sí me importa que no tenga tiempo ni para darme buenos días”. Su posición es firme, espera que el joven sienta la necesidad de comunicarse al quedarse sin fondos en su tarjeta.

“Dice que está muy ocupado, un adolescente de 15 años cuya única responsabilidad es ir a clase”, exclamó la madre, evidenciando la brecha en la percepción de las ocupaciones y responsabilidades entre su hijo y ella. A pesar de que el joven ni siquiera la sigue en redes sociales, ella entiende que está disfrutando y aprendiendo, una realidad que aprecia, aunque le resulta difícil aceptar la falta de una pequeña muestra de consideración diaria.

El impacto del video no se hizo esperar, ya que en poco tiempo alcanzó más de 200 mil reproducciones, acumuló 8.500 “me gusta” y generó cientos de comentarios de usuarios que se identificaron con la situación narrada por la madre. La dinámica familiar y las tensiones de la era digital quedaron expuestas en este fenómeno viral, resonando con la experiencia de muchos padres de adolescentes.

“No voy a ceder antes que él”, sentenció la mujer, marcando una postura que podría ser objeto de debate en un mundo cada vez más conectado pero paradójicamente, a menudo distante en las relaciones interpersonales más cercanas.

“Espera sentada. Bienvenida al club”, “Cuando te pida, tarda dos días en responderle y le dices lo mismo, que estás muy ocupada”, “Yo tengo uno de 15 años y me pasa lo mismo. Solo tiene el móvil para cuando él lo necesita. Yo el vacío se lo haría cuando me pidiese dinero”, “Me pasó algo parecido. Al volver, mi madre estaba fría como el hielo. En una conversación me soltó el clásico ‘no estoy enfadada, solo decepcionada’. Y se me clavó en el pecho la tristeza. Nunca volví a no llamar”, fueron algunos de los comentarios en la publicación.