Wall Street y BMV siguen «decapa caída» Cierran por tercer día consecutivo con números negativos

  • Los mercados accionarios hilaron una tercera jornada consecutiva con resultados mayoritariamente negativos

Los mercados recibieron sólidos datos de empleo en Estados Unidos este jueves a través de la encuesta ADP, la cual mostró la creación de 164 mil posiciones laborales, cifra superior a los 125 mil pronosticados, lo que continuó generando dudas entre los inversionistas sobre cuándo podría comenzar la Reserva Federal con las reducciones a los costos de endeudamiento.

De tal manera que los principales índices de renta variable en Wall Street finalizaron la sesión con saldos mixtos, ya que el Nasdaq extendió sus bajas con 0.56 por ciento en los 14 mil 510.30 enteros, al igual que el S&P 500 que cedió 0.34 por ciento en los 4 mil 688.68 puntos, en contraste, el Promedio Industrial Dow Jones consigue sumar 0.03 por ciento con 37 mil 440.34 unidades.

Las negociaciones en Europa cambiaron a verde este jueves y los aumentos fueron encabezados por el IBEX 35 en España, al cerrar con un aumento de 1.28 por ciento en los 10 mil 182.40 enteros, impulsado principalmente por un alza en los precios de las acciones bancarias. También destacó el FTSE MIB en Italia que finalizó con un avance de 1.01 por ciento en los 30 mil 403.96 puntos.

En el mercado local las pizarras en rojo continuaron, ya que el S&P/BMV IPC de la Bolsa Mexicana de Valores presentó una baja de 0.57 por ciento en los 55 mil 406.96 enteros, seguida por una pérdida de 0.59 por ciento con mil 142.79 unidades para el FTSE-BIVA de la Bolsa Institucional de Valores.
En cuanto a los crudos marcadores, estos reflejaron ajustes a la baja, tras los fuertes incrementos registrados en la sesión previa.

Para el caso del West Texas Intermediate (WTI) el descenso fue de 0.43 por ciento en los 72.39 dólares por barril y para el referencial Brent la variación es de 0.74 por ciento menos cotizando en los 77.67 billetes verdes por unidad. Estos números rojos responden a un aumento en las reservas de gasolina en Estados Unidos que contrarrestan las presiones por el lado de la oferta ante el cierre del campo petrolífero en Libia.