Víctor Manuel Reséndez Ruiz, mejor conocido como Latin Lover, conversó con el Vampiro Canadiense y habló de sus inicios como luchador en la Triple A. De acuerdo con el regiomontano, Konnan intentó en varias ocasiones ponerle el pie porque, según Latin Lover, no era del agrado del cubano.
De acuerdo con Víctor, la primera vez que notó que no le agradaba a Konnan fue en una firma de autógrafos, donde una pequeña le pidió al cubano que le firmara una foto de Latin Lover. Según el nacido en Monterrey, El Bárbaro aventó la fotografía y comentó «este pendejo no soy yo».
Latin Lover señaló que en sus primeros años dentro de la Triple A no decía nada si lo molestaba porque sentía mucho respeto por sus compañeros, aunque el luchador cubano era el que más lo molestaba. Según Reséndez Ruiz, El Bárbaro le pidió que no cargara a nadie y le ponía cosas en sus botas, como excremento o catsup. «Había una cargada que yo hacía como Canek y él primero me dijo ‘no quiero que vuelvas a cargar a nadie’. (…)
Un día en el Juan de la Barrera me dijo ‘oye hijo de tu puta madre, ya te dije muchas veces que no vuelvas a cargar a nadie’. (…) Ese día el Hijo del Santo me defendió y le dijo ‘¿Por qué no le dices algo a Canek? Déjalo en paz. Si el chavo no se quiere defender yo sí, déjalo en paz'».
Las tensiones continuaron y Latin Lover explotó después de que Carlos Santiago Espada le escupió y lo empujó en una ocasión. El regio aseguró que estaba llorando de coraje, así que retó a Konnan a una pelea, ya que estaba harto de los abusos del cubano.
Konnan quiso justificarse Cuando Espada volvió a la Triple A se acercó a Víctor para intentar explicarle por qué lo molestaba: «Yo te hacía bullying porque yo quería que tu respetaras la lucha, que aprendieras, que la amaras como yo.
Esto es mi vida». Pese a que las cosas habían quedado aclaradas, poco tiempo después en una rueda de prensa el cubano le tiró con todo al regiomontano: «Dijo que yo era una diva, que quería cobrar como antes, que ya estaba grande y que no metía gente».
Finalmente, Latin Lover señaló que recientemente se encontró a Konnan y, aunque le había pedido que no lo saludara, el cubano se le acercó y le extendió la mano. Reséndez Ruiz comentó que finalmente se decidió por responderle el saludo, aunque agregó que las «cosas que le han pasado», como las complicaciones de salud que ha sufrido en los últimos años, «bien ganado se lo tiene».
