Fósil humano hallado en China desafía lo que se sabe de la evolución

En un emocionante avance que agrega una intrigante capa al misterio de la evolución humana, un equipo de destacados paleontólogos de la prestigiosa Academia China de Ciencias, en colaboración con colegas de diversas instituciones académicas, ha dado con un asombroso hallazgo.

Este descubrimiento, plasmado en un revelador estudio publicado en el Journal of Human Evolution, apunta hacia un linaje de homo sapiens hasta ahora desconocido, que no encuentra paralelos ni en los neandertales, ni en los denisovanos, ni en la rama evolutiva que dio origen a nuestra propia especie. Esta novedosa revelación sugiere que nuestra comprensión del árbol genealógico humano necesita ser reevaluada, incorporando una nueva y enigmática rama.

Los restos que han suscitado tanto asombro fueron exhumados en Hualongdong, Asia Oriental, en el año 2019, y responden al nombre de HLD 6. Un fósil que, según la datación realizada, ostenta una antigüedad de aproximadamente 300 mil años.

La minuciosa investigación de la mandíbula fosilizada, fragmentos craneales y algunos huesos de las extremidades, ha sido el epicentro del análisis exhaustivo durante años.

Sin embargo, hasta el momento presente, los expertos han enfrentado dificultades para asociar estos restos con alguna especie conocida.

El análisis en profundidad de la mandíbula ha develado características inéditas que revelan que el espécimen HLD 6 es un híbrido singular entre homínidos ancestrales y humanos modernos.

Si bien su estructura facial guarda similitud con la de los humanos modernos, que se separaron de los Homo erectus hace unos asombrosos 750 mil años atrás, carece de lo que se consideraría un «mentón auténtico», lo que le emparenta con especies más arcaicas, como los denisovanos, que se distanciaron de los neandertales hace más de 400 mil años.

En palabras del estudio, «La combinación de rasgos arcaicos y modernos en la mandíbula del HLD 6 es inesperada, dada su antigüedad correspondiente al final del Pleistoceno Medio, y contrasta con los individuos de la especie Homo que coexistieron en esa época, como Xujiayao, Penghu y Xiahe».

Este extraordinario descubrimiento conlleva la sugerente teoría de que, en un pasado remoto, tres linajes distintos convivieron en Asia: el Homo erectus, los denisovanos y esta enigmática nueva rama, filogenéticamente cercana a los Homo sapiens.

El impacto es profundo, pues esto implica que ciertos atributos «modernos» de nuestra especie podrían haber emergido hace unos sorprendentes 300.000 años, mucho antes de la aparición documentada del Homo sapiens en China, hace aproximadamente 120.000 años.

Los cimientos de nuestra comprensión sobre la evolución humana parecen temblar ante esta nueva evidencia, que abre un panorama revolucionario acerca de cómo diferentes especies coexistieron y, posiblemente, interactuaron en el pasado ancestral.

Sin embargo, para validar esta teoría transformadora, se requiere de ulteriores investigaciones arqueológicas y el análisis minucioso de restos fósiles adicionales.

Solo entonces podremos descubrir con certeza los secretos que el cráneo HLD 6 alberga y el papel crucial que jugó en la danza de la evolución humana en tierras orientales.