Jugadores de Cruz Azul piden parar el grito homofóbico

Walter Montoya, Luis Romo y José de Jesús Corona, coincidieron en que ese comportamiento de la afición únicamente perjudica al equipo dentro y fuera de la cancha.
Futbol Cruz Azul

Luego de que el grito discriminatorio y condenado por la FIFA provocara que el partido de media semana contra el León se detuviera un par de ocasiones, la Comisión Disciplinaria de la FMF sancionó al Cruz Azul con un partido de veto que se hará efectivo en el duelo de repechaje o cuartos de final que dispute como local, y advirtió que si continúa esta situación se impondrán castigos más severos.

Ante esta situación, jugadores de La Máquina se unen para pedirle a su afición que deje de tener estas conductas que lejos de apoyarlos los están perjudicando.

«Es un hecho lamentable porque contra el León nos cortó el ritmo. Es un tema complicado porque nosotros no manejamos al público ni estamos en la tribuna para controlarlo. Es una lástima porque el club ya tuvo una multa y ahora no vamos a tener la energía de la gente, ojalá que a partir de ahora sólo se enfoquen en alentar porque en el campeonato fueron fundamentales, así que todos salimos perdiendo”, consideró Walter Montoya.

Por su parte, Luis Romo, quien ha vivido esta problemática con la Selección Mexicana y ahora con el conjunto cementero, desea que la afición aprenda a respetar y a entender que esta situación ya se ha convertido en un problema que al Tricolor lo puede dejar sin Mundial y a su equipo sin afición en los partidos de liguilla.

«Es una pena que se siga dando, ya tenemos que aprender y cambiar esa mentalidad, porque puede ser que para algunos no sea malo, pero es algo que ya nos ha afectado. Tenemos que ser muy conscientes de lo que hacemos y sobre todo ser responsables porque ya provocó un veto para la Selección y ahora a nosotros. La verdad es que a uno como jugador sí le molesta porque traes un buen ritmo y por ese grito te lo cortan y te afecta, pero sobre todo me apena que antes como mexicano te etiquetaban por cosas buenas y ahora te señalan por ese grito. La verdad es que como sociedad estamos muy mal y lo tenemos que cambiar porque nos podemos quedar sin ir al Mundial”, destacó.

Mientras que el capitán Jesús Corona también coincidió en que además de infringir las normas de la FIFA, el equipo sufre las consecuencias durante y después del partido.

«Debemos entender que todos somos parte de un espectáculo, los jugadores se brindan y se entregan por sus acciones y los aficionados deben disfrutar o reclamar sin agredir y deben estar conscientes de que si siguen haciendo ese grito van a seguir afectando. En cuanto se activa el protocolo se rompe el ritmo del juego y ahí el afectado es el equipo”, explicó.