Rusia ya «perdió estratégicamente» guerra en Ucrania, dice Reino Unido

El jefe de Estado Mayor de las Fuerzas Armadas británicas aseguró que Rusia ya «perdió estratégicamente» la guerra contra Ucrania.

Rusia ya «perdió estratégicamente» la guerra contra Ucrania, que le ocasionó numerosas bajas y llevó a un fortalecimiento de la OTAN, dijo el jefe de Estado Mayor de las Fuerzas Armadas británicas en una entrevista publicada el viernes.

Este ha sido un terrible error de Rusia. Rusia nunca tomará el control de Ucrania», afirmó el almirante Tony Radakin, añadiendo que Moscú saldría del conflicto como una «potencia disminuida».

Rusia ya perdió estratégicamente. La OTAN es más fuerte, Finlandia y Suecia tratan de adherirse» a la alianza, subrayó Radakin en declaraciones a la agencia de noticias británica Press Association.

Según el oficial, el presidente ruso, Vladimir Putin, podría lograr «éxitos tácticos» en las próximas semanas, pero a costa del sacrificio de una cuarta parte de la potencia militar rusa.

Esas ganancias «ínfimas», prosiguió, estaban dejando a Rusia sin tropas y sin misiles de alta tecnología.

La ofensiva rusa «está ganando un par de kilómetros cada día, entre dos, tres y cinco [km]», dijo el almirante.

Pero «Rusia tiene vulnerabilidades porque se está quedando sin gente, se está quedando sin misiles de alta tecnología», insistió.

El jefe de Estado Mayor indicó que Putin ya usó aproximadamente un 25% de las fuerzas del ejército para ganar apenas una pequeña porción del territorio.

Por otro lado, Radakin elogió al «valiente» pueblo ucraniano y prometió que el Reino Unido apoyaría a Kiev «a largo plazo», con más armas.

Hemos estado proporcionando armas antitanque, hay otros elementos que estamos proporcionando y eso continuará», dijo.

El Kremlin advirtió el jueves contra la entrega de armas de los países occidentales a Ucrania. Proseguir con esos envíos «es totalmente fútil y solo ocasionará más perjuicios al país», dijo el portavoz de la presidencia rusa, Dmitri Peskov

Macron visita Kiev y denuncia ‘indícios de crímenes de guerra’

El presidente de Francia, Emmanuel Macron, dijo este jueves que en un suburbio de Kiev había indicios de crímenes de guerra luego de las “masacres” cometidas por las fuerzas rusas.

El mandatario habló en Irpín, que visitó junto a los líderes de Alemania, Italia y Rumanía, para mostrar su respaldo a Ucrania. Macron denunció la “barbarie” de los ataques que asolaron la ciudad y elogió el valor de los residentes en Irpin y en otras localidades de la región de Kiev, que impidieron la llegada de las fuerzas rusas a la capital.

A su llegada a Kiev antes en el día, los cuatro líderes Kiev fueron recibidos con el sonido de las sirenas antiaéreas. El viaje es una muestra de respaldo colectivo europeo a Ucrania mientras trata de resistir a la invasión de Rusia.

La visita, que incluye una reunión con Volodímir Zelenski, tiene una gran carga simbólica ya que las tres potencias de Europa Occidental han enfrentado críticas recurrentes por no enviar al país el nivel de armamento que reclama el presidente.

También han sido señalados por no haber visitado Kiev antes. En las últimas semanas y meses, otros líderes europeos realizaron el largo viaje en tren para mostrar su solidaridad con una nación atacada, incluso en épocas en que los combates estaban más cerca de la capital que ahora.

Macron, el canciller de Alemania, Olaf Scholz y el primer ministro de Italia, Mario Draghi, que representan a las tres mayores economías de la Unión Europea, viajaron juntos a Kiev en un tren especial nocturno habilitado por las autoridades ucranianas.

Klaus Iohannis, presidente de Rumanía, que comparte frontera con Ucrania y ha sido un destino clave para los refugiados ucranianos, viajó en otro tren. “¡Esta agresión rusa ilegal debe parar!”, tuiteó a su llegada a la ciudad.

Rusia mató a cientos con armamento prohibido: AI

“Este es un mensaje de unidad europea para el pueblo ucraniano, de apoyo ahora y en el futuro, porque las próximas semanas serán muy difíciles”, afirmó Macron.

Las fuerzas rusas siguen presionando en su ofensiva en la región oriental del Donbás, ganando terreno de forma lenta pero constante frente a unas tropas ucranianas a las que superan en número y equipos, y que piden más armamento a sus aliados occidentales.

Varias sirenas antiaéreas sonaron en la capital mientras los líderes europeos estaban en su hotel preparándose para el resto de la jornada, y las autoridades de Kiev instaron a la población a buscar refugio. Estas alertas son habituales.

A su salida del hotel, Macron, llevándose la mano al corazón, declaró en inglés: “Quiero mostrar mi admiración por el pueblo ucraniano”.

Scholz apuntó que los líderes no solo buscan mostrar su solidaridad, sino también su intención de mantener la ayuda financiera y humanitaria a Ucrania, además del suministro de armas, reportó la agencia noticiosa alemana dpa.

Ese respaldo continuará “mientras sea necesario para la lucha de Ucrania por la independencia”, agregó, según fue citado por dpa.

Scholz destacó también la importancia de las sanciones contra Rusia, que podrían llevar a Moscú a retirar sus tropas, apuntó la agencia.

Scholz, Macron y Draghi han sido criticados además por mantener el contacto con el presidente de Rusia, Vladimir Putin.

Muchos líderes y población de las naciones bálticas y centroeuropeas, que estuvieron bajo la órbita de Moscú durante la Guerra Fría, creen que Putin solo entiende el uso de la fuerza, y han visto los esfuerzos de Macron y de otros para mantener el contacto con el líder ruso tras la invasión como algo inaceptable.

Los ucranianos esperan que la visita suponga un punto de inflexión para abrir camino a un nuevo suministro de armas.

Tamara Malko, que reside en Pokrovsk, en la provincia oriental de Donestsk, señaló que, hasta ahora, Macron y Olaf han sido “muy fríos” con los ucranianos y que aguardaba un cambio.

“Deseamos mucho, muchísimo, la paz y tenemos grandes esperanzas en Macron y Scholz”, comentó. “Queremos que vean y entiendan nuestro dolor”.

Por su parte, el gobernador de Luhansk, Serhiy Haidai, señaló que la visita no aportará nada si los mandatarios piden que Ucrania alcance un tratado de paz con Rusia que implique ceder territorio. Eso es algo que los ucranianos nunca aceptarían, añadió.

“Estoy seguro de que nuestro presidente, Volodímir Zelenski, no va a hacer concesiones ni a comerciar con nuestro territorio. Si alguien quiere parar a Rusia cediéndole territorio, Alemania tiene Baviera, Italia tiene la Toscana, los franceses pueden ceder la Provenza, por ejemplo”, apuntó..