El luchador mexicano emocionó a sus seguidores británicos en un doble evento que honró la lucha libre y la tradición del Día de Muertos.
El Hijo del Santo, ícono de la lucha libre mexicana y mundial, sigue emocionando a sus fanáticos en su gira de despedida. Este fin de semana, el luchador llenó en dos ocasiones el prestigioso York Hall de Londres, reafirmando su legado y la pasión por la lucha libre en todo el mundo
Durante dos noches consecutivas, El Hijo del Santo encabezó un cartel que incluyó a figuras como El Santo Jr. y Cinta de Oro, quienes se enfrentaron a El Hijo de Fishman, Ciclón Ramírez y Xtreme Tiger. La velada se destacó no solo por la espectacularidad de los combates, sino también por la sorpresa que los fanáticos británicos prepararon en honor al Día de Muertos: la decoración del York Hall con papel picado y un altar conmemorativo, elementos típicos de la festividad mexicana.
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“Estoy muy contento por el recibimiento en Londres, la verdad tenía mucho tiempo que no venía y el recibimiento fue maravilloso, me dio mucho gusto ver a niños y familias completas que siguen la lucha libre”.
Un legado que trasciende generaciones
El luchador expresó su alegría al ver a niños portando la famosa máscara plateada y la capa, símbolo de un linaje de luchadores que comenzó con su padre, El Santo, el Enmascarado de Plata original. Como muestra de su agradecimiento, El Hijo del Santo subió a algunos niños al ring para compartir un momento inolvidable.
“Es muy bonito que las nuevas generaciones conozcan al personaje de El Santo… se me quedaban viendo y subí al ring a uno de ellos… entonces los otros niños se me quedaron viendo y les dije ¡vénganse con nosotros!”, relató emocionado.
El evento en el York Hall, un recinto con historia que ha visto a figuras como Muhammad Ali, KSI y Logan Paul, fue tan exitoso que El Hijo del Santo ya anunció una tercera presentación en marzo de 2025. Esta gira de despedida ha llevado al enmascarado de plata por las principales ciudades de América, Europa e incluso Asia, compartiendo su amor por la lucha libre y dejando una marca perdurable en la historia del deporte.