Orangután crea efectivo ungüento para curar una de sus heridas

Orangután Rakus en el Parque Nacional Gunung Leuser de Indonesia

Un orangután de Sumatra, herido en la cara, se curó a si mismo aplicándose un ungüento que produjo al masticar una planta medicinal, en la primera observación de tal comportamiento en un gran simio en estado silvestre, anunció el jueves la revista “Scientific Reports”.

Rakus, de unos treinta años, tenía una herida que exponía la carne debajo del ojo derecho a lo largo de sus fosas nasales, lesión originada “probablemente en una pelea con otro orangután macho”, explicó Isabelle Laumer, primatóloga del Instituto Max Planck y principal autora del estudio.

El orangután integra un grupo de 130 congéneres, todos sin domesticar, sujetos a observación en el parque nacional indonesio de Gunung Leuser.

Tres días después de su lesión Rakus comenzó a masticar hojas de una liana llamada Akar Kuning (Fibraurea tinctoria) pero, en vez de ingerirla colocó el jugo de la planta sobre su herida abierta, y la cubrió completamente con la pulpa de liana.

Cinco días más tarde la herida se cerró y, dos semanas después, dejó una cicatriz apenas visible.

El medicamento utilizado es parte de la farmacopea tradicional en la región, desde China hasta el sudeste asiático.

Gracias a sus propiedades antibacterianas y antiinflamatorias esta liana y otras similares “se utilizan como medicinas tradicionales para diferentes enfermedades, como la malaria”, según la bióloga citada.

Se trata del primer “caso documentado de tratamiento de una lesión por un animal salvaje con una especie de planta que contiene sustancias biológicas activas”, destaca el estudio.