Ash Cooper, de 18 años, originalmente conocida como Joshua Cooper, se ha declarada culpable de asesinato en tercer grado, posesión de un instrumento del crimen y manipulación de pruebas físicas en la muerte de Morgan Connors, de 12 años.
El crimen ocurrió el 25 de noviembre de 2022 en un parque de casas móviles en Bensalem Township mientras las dos amigas veían Netflix. Según los informes, Morgan se levantó para ir al baño, momento en el que Cooper decidió limpiar y organizar la caja fuerte de armas de su padre.
Los detalles de lo que sucedió después son confusos, pero la madre de una amiga de Cooper alertó a la policía tras ver el cuerpo de Morgan en una videollamada de Instagram. Al llegar al lugar, la policía encontró a Cooper huyendo de la casa móvil y a Morgan sin vida en el baño con un disparo mortal.
Toallas ensangrentadas, productos de limpieza y un fuerte olor a cloro rodeaban la escena.
Si bien Cooper inicialmente alegó que el crimen fue un accidente, nunca ha revelado un motivo claro. Los documentos judiciales revelan que ella mencionó tener una relación sexual con la víctima.
