Cabeza de estatua de Alejandro Magno descubierta en Turquía

  • Alejandro Magno alcanzó un estatus casi mítico en los siglos posteriores a su muerte, como lo demuestra esta estatua romana del siglo II d.C.

Líderes antiguos como César y Nerón se han convertido en figuras del mito popular y de la historia a lo largo de los siglos transcurridos desde sus reinados. Este proceso de transformar un líder político en una idea comenzó bastante temprano para algunos, como Alejandro Magno.

El líder militar macedonio gobernó toda Grecia y hasta Pakistán y Afganistán. Su muerte en 323 a. C. dividió su imperio entre sus generales, pero también consagró al difunto en la leyenda griega (más tarde romana). Esta fascinación duradera queda evidenciada por un hallazgo reciente de una cabeza de mármol del siglo II que representa a Alejandro en el sitio de un teatro romano en Turquía.

La cabeza de mármol, decapitada de su cuerpo anterior, fue descubierta en los restos de los niveles superiores de un teatro romano en Konuralp, al norte de Düzce, Turquía. Parte del Imperio Romano, alguna vez fue territorio de Alejandro Magno.

Sin embargo, la estatua fue creada en el siglo II d.C., más de 400 años después de la muerte del líder. A pesar de esta brecha temporal, los arqueólogos pudieron reconocerlo por su postura y peinado distintivos. En primer lugar, sus ojos se elevan al cielo, una mirada típica que se ve en las representaciones de Alejandro.

Además, el voluminoso cabello elegantemente tallado de la estatua es icónicamente Alejandro. “Los dos mechones de pelo en el centro de la frente, separados hacia atrás y hacia los lados, parecen la melena de un león”, se lee en un comunicado de Düzce. «Esta representación es un peinado exclusivo de Alejandro Magno». Además, Alejandro era famoso por preferir un aspecto bien afeitado.

Entonces, ¿por qué los habitantes de Turquía de la época romana inmortalizarían a Alejandro Magno tanto tiempo después de su muerte, tallado junto a dioses y otras figuras en mármol? De hecho, Alejandro se había convertido en una especie de figura histórica mítica, invocada por las partes interesadas para idealizar el liderazgo.

Su rápida conquista de vastas extensiones de tierra, su tutela bajo Aristóteles y su joven muerte lo convirtieron en un punto de referencia, incluso cuando gran parte del imperio helenístico macedonio que gobernaba quedó bajo control romano posterior.

La imagen de Alejandro en monedas y mármol podría servir como fuerza legitimadora y símbolo de una cultura helenística idealizada. Por muy fuera de lugar que pueda parecer a primera vista su descubrimiento en un teatro de la época romana en Turquía, es emblemático del continuo legado cultural y militar del rey macedonio.