Invitó a cenar lomo con champiñones a sus suegros y los mató

En un giro desolador tras lo que parecía una fina cena, Erin Patterson fue detenida en relación con la muerte de tres personas debido a la ingestión de champiñones venenosos durante una reunión familiar en la localidad de Leongatha, situada al sureste de Melbourne, Australia.

Este suceso ha conmovido profundamente a la nación, subrayando los riesgos asociados al consumo de ciertos tipos de setas locales que pueden ser altamente tóxicas.

En estas mismas páginas dimos cuenta de que invitó a su familia a comer setas y todos se intoxicaron menos ella.

La policía del estado de Victoria comunicó que la detención es el resultado de una meticulosa investigación que ligó la tragedia a una aparente confusión de setas por parte de Patterson.

Remontándonos al 29 de julio, día del fatídico almuerzo, Erin había invitado a Don y Gail Patterson, así como a la pareja pastoral Ian y Heather Wilkinson, a su hogar con la intención de disfrutar de una comida juntos.

El menú incluía un exquisito solomillo Wellington, que fue servido con un acompañamiento que, sin saberlo, cambiaría sus vidas para siempre.

Tras el almuerzo, los cuatro comensales comenzaron a mostrar síntomas de envenenamiento, siendo trasladados de urgencia al hospital, donde la condición de tres de ellos se deterioró rápidamente, llevándolos a la muerte en menos de una semana.