El sinaloense Gilberto “Zurdo” Ramírez se sacudió la pobre exhibición que dio en noviembre pasado ante Dmitry Bivol en su pelea ante el estadounidense Joe Smith, a quien superó por decisión unánime con un encuentro en el que priorizó la estrategia antes que salir a soltar golpes.
Después de diez episodios de constantes emociones, Ramírez trabajó para que las tarjetas acabaran con registros a su favor de 99-91 (x3), en lo que fue su primera avanzada para tratar de dominar los pesos cruceros, ya que se trató de una pelea eliminatoria por el título de peso crucero de la AMB.
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Zurdo Ramírez fue más cerebral
En un encuentro en el hotel Cosmopolitan de Las Vegas, Ramírez demostró que aprendió de la lección que le dio Bivol, ya que se le notó meticuloso en sus movimientos, a la espera de mermar poco a poco a Smith, quien, por el contrario, fue más directo a buscar golpes de poder.
Sin embargo el estadounidense falló en su apuesta, ya que el de Mazatlán acabó por ser más efectivo, y como muestra de ello fue que conectó el 35 por ciento de sus golpes, de los cuales 51 fueron de poder.
Quiere de nuevo a Bivol.
Tras su victoria, Ramírez señaló que su deseo más profundo ahora es tener una revancha con Dmitry Bivol, pero igual está enfocado en evolucionar en los pesos crucero, en donde quiere ser el primer mexicano en convertirse en campeón del mundo.
“Por supuesto, me lastimó el ego, el alma y como mexicano quiero una revancha, quiero vencerlo (a Bivol). (Pero) No necesito mirar atrás. Necesito mirar hacia adelante, y quienquiera que esté al frente, necesito vencerlo.
No veo el sentido de regresar (a las 175). Quiero ser el primer campeón mexicano de peso crucero. Esa es mi meta y para eso estoy trabajando”.