Los Bravos lograron su octava victoria consecutiva y barrieron una serie de dos juegos contra los Filis, que ingresaron el fin de semana habiendo ganado 13 de sus últimos 15 juegos. Atlanta reclamó esta última victoria con la ayuda de Michael Harris II, quien rompió un empate sin anotaciones.
Los Bravos tomaron una pequeña venganza luego de que el año pasado fueron derrotados en Filadelfia durante la serie divisional.
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Nunca nos descartamos a nosotros mismos. Este grupo es especial porque jugamos con la misma mentalidad hasta el último out. Vamos a pelear como perros hasta el final”, dijo Austin Riley en declaraciones recogidas por la agencia AP.
El décimo cuarto bambinazo de Ozuna, un batazo entre el jardín izquierdo y central, siguió de un sencillo de Riley que el guardabosques Kyle Schwarber no pudo jugar de buena forma y abrió la puerta para un par de carreras de los Bravos.
Es una jugada que debo hacer”, señaló Schwarber. “No sé cómo ni por qué, pero tengo que atraparla. No está en Marte, el juego depende de mí esa pelota, podemos extender ese juego en el 10. Lo vi bien, sólo tengo que atraparlo”.
Cuatro lanzadores de los Bravos, el abridor Bryce Elder, Hoby Minter, Raisel Iglesias y Nick Anderson, no permitieron una carrera limpia en 10 entradas, toleraron sólo cuatro hits y dos bases por bolas y poncharon a 10. La única anotación de la organización de Filadelfia se produjo con un elevado de sacrificio de Alec Bohm, anotando el corredor automático JT Realmuto en el décimo rollo.
Bryce Elder comenzó esta temporada en la rotación de Triple-A Gwinnett. Pero ahora ha completado las mejores 90 entradas del equipo para el equipo que posee el récord más alto de la Liga Nacional. Ayer lanzó siete capítulos en los que limitó a Filadelfia a tres hits y recetó seis ponches.