Algunos usos que se le pueden dar al alcohol de limpieza.
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1. Exterminación de plagas
Sumerge o rocía isopropanol en objetos que estén en contacto con parásitos o insectos, por ejemplo, los collares o los peines de las mascotas. El efecto desinfectante acaba con algunas bacterias y virus.
2. Mantenimiento de piezas electrónicas e informáticas
Los equipos informáticos se componen de partes mínimas y delicadas que requieren aseo minucioso. Dada su potencia limpiadora y disolvente, es preferible usar alcohol isopropílico.
Al evaporarse, no deja restos y no es tan volátil, así que no daña las piezas. Sucede igual con otros electrónicos.
Con un paño humedecido en isopropanol higienizas pantallas LCD, impresoras 3D, unidades de discos ópticos, tabletas, reproductores de CD y consolas de videojuegos.
3. Desaparición de mal olor
Aparte de esterilizar, esta clase de alcohol elimina malos olores. Pulveriza un poco dentro de los zapatos y percibe cómo cambia el aroma.
4. Lavado de baldosas y persianas
El isopropanol es eficiente quitando el moho de las baldosas y la acumulación de polvo en persianas. Sin embargo, no lo recomiendan en todo tipo de pared o suelos.
En caso de azulejos, juntas ennegrecidas, pisos de mármol o madera natural, resulta mejor el vinagre blanco. Por lo demás, combinar alcohol isopropílico con otras sustancias aromáticas limpiará y esparcirá buen aroma.
5. Quitar manchas
Las marcas de pintura, tinta o acrílico en telas salen con isopropanol. Unta y frota un poco del líquido para eliminar la mancha.
