Durante un set y medio, Alejandro Davidovich casi levitó en la Louis Armstrong del US Open contra Matteo Berrettini.
El malagueño planteó una estrategia perfecta para buscar el golpe que más le cuesta ejecutar al italiano, el drive en carrera hacia la derecha, y le dominó hasta que cabeza de serie número 13 encontró el camino para remontar desde su potente saque y poner en jaque al español, que fue capaz de sobreponerse y forzar el quinto set.
Alex lo empezó mal y, para colmo, en un estiramiento se hizo daño en la rodilla izquierda.
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Ya no pudo reaccionar a los dos break de Berrettini, que se impuso por 6-3, 6-7 (2), 6-3, 6-4 y 6-2 en 3h45.
Davidovich se despide de Nueva York con la cabeza alta y a un paso de repetir el éxito del año pasado en Roland Garros, cuando fue cuartofinalista.
Su rival está acostumbrado al alcanzar esas alturas en Grand Slams.
Esta es la quinta vez consecutiva que lo logra.
El martes, se enfrentará al noruego Casper Ruud, que pudo con el francés Corentin Moutet (6-1, 6-2, 6-7 (4) y 6-2 en 3h20).
A fin de cuentas, los 18 aces de Berrettini, para un total de 49 golpes ganadores, fueron diferenciales en un encuentro muy igualado, que pudo decantar el del Rincón de la Victoria cuando se apuntó un break para ponerse con 3-2 y saque en la segunda manga.
Su rival reaccionó de inmediato e igualó en un desempate en el que fue muy superior, igual que en los dos siguientes parciales.
El quinto empezó mal para Davidovich, animado sin descanso por el grupo de fans incondicionales que tiene en el torneo ( le decían “Let’s go, Foki”, “Vamos, Foki”, por su segundo apellido, Fokina) y terminó con esa posible lesión de ligamentos.
