Me emocioné al final, el partido fue mentalmente muy duro”, explicó
La checa Petra Kvitova derrotó en tres sets a la estadunidense Madison Keys y avanzó por primera vez en su carrera a la final del torneo WTA 1000 de Cincinnati.
Kvitova, doble campeona en Wimbledon (2011 y 2014) y número 28 del ranking de la WTA, remontó un set en contra para imponerse a Keys, vigésima, por 6-7 (6/8), 6-4 y 6-3 en dos horas y 20 minutos de juego.
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La estadunidense, ganadora en Cincinnati en 2019, llegaba al choque en trayectoria ascendente tras su triunfo ante la número uno mundial, la polaca Iga Swiatek, pero este sábado sucumbió ante la potencia del servicio de Kvitova en los momentos clave.
“Ha sido un partido increíble. Esperaba que fuera duro, pero no tanto”, reconoció Kvitova, quien se aseguró su regreso al Top-20 de la WTA.
“No me importa la clasificación, lo importante es estar en otra final. Para eso juego al tenis, para competir por los trofeos”, afirmó la checa, quien rompió a llorar en su silla tras sellar el triunfo.
Me emocioné al final, el partido fue mentalmente muy duro”, explicó.
A sus 32 años, Kvitova pugnará el domingo por su noveno título de Masters 1000.
Kvitova tratará de cosechar su 30º trofeo del circuito y agrandar así uno los mejores palmarés del tenis femenino de la última década, que inauguró en 2009 en Linz, Austria.
El sábado, la checa arrancó con problemas de precisión en su demoledor servicio (10 doble faltas en el partido) que facilitaron que Keys se impusiera en el primer set.
Con el apoyo del público, la estadunidense mantenía la solidez con la que sorprendió en octavos a Swiatek y en cuartos a la kazaja Elena Rybakina, campeona del último
Wimbledon.
En la segunda manga, Kvitova mejoró en defensa y logró dos quiebres que llevaron el choque hasta el set decisivo.
La checa encarriló el triunfo con otra ruptura de servicio en su primera oportunidad y exhibió su fortaleza en el servicio para neutralizar el último cartucho de Keys, que falló tres pelotas de quiebre para igualar 4-4.
