El cardenal Timothy Dolan lo llama “trovador de la misericordia de Dios” durante la ceremonia en la catedral de Saint Patrick

La catedral de Saint Patrick, en el corazón de Manhattan, se convirtió este miércoles en un lugar de unidad espiritual para rendir homenaje al papa Francisco, fallecido el lunes tras presidir la misa de Pascua. Líderes religiosos de diversas denominaciones, funcionarios públicos y cientos de fieles asistieron a la misa funeral presidida por el cardenal Timothy Dolan, quien definió al Pontífice como “un regalo de Dios para todos nosotros”.
“Fue un trovador de la misericordia de Dios, un alma noble, amorosa y humilde”, dijo Dolan durante su homilía, conmovido ante una gran imagen de Francisco, enmarcada por lirios blancos. La ceremonia tuvo un carácter ecuménico, con la presencia de rabinos, monjas, ortodoxos y líderes como el alcalde Eric Adams y el reverendo Al Sharpton, quienes expresaron sus condolencias y admiración por el legado del Papa.
Francisco dejó una huella especial en la ciudad desde su visita en 2015, cuando ofició misa en ese mismo templo. Entre los asistentes al homenaje se encontraban muchos inmigrantes latinos, algunos vestidos de negro, como Rita Alonso, quien recordó con lágrimas el día que le cantó al Papa en El Barrio. “Guardo esas fotos como un tesoro”, expresó emocionada.
El servicio también fue un momento de introspección. Dolan, uno de los cardenales que participará en el cónclave para elegir al nuevo pontífice, recordó que Francisco pedía siempre que oraran por él y detestaba los sermones largos. “Por eso era tan querido. Era auténtico”, concluyó.
La misa se realizó alrededor de un sencillo altar decorado con una estola morada y otra blanca, un cáliz y un crucifijo. En ese ambiente solemne, Dolan reiteró: “Hoy oramos por él, agradecidos por su vida, su fe y su forma de enseñarnos a vivir… y morir”.