Revelan reunión privada de Alma Elena Aguilar Vizcaya con consejeros del PAN y Enrique Galindo; critican posible parcialidad.
La transparencia y legalidad en el proceso de renovación de la dirigencia estatal del Partido Acción Nacional (PAN) han quedado bajo escrutinio, luego de que Alma Elena Aguilar Vizcaya, integrante de la Comisión de Procesos Electorales del partido, fue captada en una reunión privada en el piso 18 del Hotel Fiesta Americana con consejeros panistas y el alcalde capitalino Enrique Galindo Ceballos.
Aguilar Vizcaya, forma parte de la nómina municipal como auxiliar técnico C en la Contraloría Municipal y percibe un sueldo de $12,755 mensuales.
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Su presencia en este encuentro genera serias dudas sobre su imparcialidad en el proceso electoral interno del PAN, ya que esta comisión tiene el mandato de garantizar un proceso ético y equitativo.
La reunión se da a pocos días de que los consejeros definan la dirigencia panista este domingo 8 de diciembre.
Las imágenes de Aguilar Vizcaya participando en una convivencia privada con actores que podrían influir en el resultado electoral, entre ellos un funcionario ajeno al PAN como Galindo Ceballos, plantean interrogantes sobre posibles acuerdos o favoritismos que comprometan la legitimidad del proceso.
Diversas voces dentro del partido y la opinión pública han señalado que esta actuación no solo transgrede principios éticos, sino que podría interpretarse como una maniobra para influir en la elección interna. El vínculo de Aguilar Vizcaya con la administración municipal y su participación en espacios donde se toman decisiones políticas delicadas refuerzan estas preocupaciones.
La falta de ética y transparencia en la conducción del proceso electoral del PAN pone en tela de juicio la credibilidad de la contienda interna. Este caso deja entrever posibles maquinaciones que no solo afectarían al partido, sino que también podrían deteriorar la confianza ciudadana en los procesos democráticos internos de los institutos políticos.
