EL TRI perdió su dominio al ser superado por la selección norteamericana, que escala al puesto 16
El Tri deja de ser el rey. La selección de Estados Unidos se consagra como el nuevo líder de Concacaf tras una doble jornada de ensueño en noviembre, que incluyó triunfos clave ante Jamaica. Este ascenso al puesto 16 del ranking FIFA no solo refleja la solidez del equipo dirigido por Pochettino, sino también el retroceso de México, que cae al puesto 19 tras una serie de actuaciones irregulares.
El equipo mexicano, liderado por Javier Aguirre, aún saborea su clasificación a semifinales de la Liga de Naciones Concacaf tras vencer a Honduras en un global de 4-2. Sin embargo, la derrota en el partido de ida y su inconsistencia en el terreno de juego han pasado factura. La afición y los expertos mexicana no tardaron en señalar que la pérdida del liderazgo regional no es un simple dato, sino un llamado de atención para replantear tácticas y estrategias por parte de la selección mexicana. Mientras tanto, Estados Unidos muestra un fútbol sólido, respaldado por un plantel joven y talentoso que mantiene a la selección en la élite de la región. El contraste con México no podría ser más evidente: uno asciende con paso firme, mientras el otro lucha por mantener su prestigio. Ahora, el Tri enfrenta semanas cruciales para recuperar terreno y demostrar que aún puede competir al más alto nivel. La pérdida del liderazgo en Concacaf no es solo un golpe al orgullo, sino una motivación para volver a ser el gigante que históricamente ha dominado la región.
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