La violencia en Chiapas y Sinaloa, así como la controversia por la reforma judicial, marcan el inicio de su gestión.
En su primer mes al frente del país, Claudia Sheinbaum Pardo, la primera mujer en ocupar la presidencia de México, ha enfrentado retos significativos. La violencia ha resurgido con fuerza, especialmente en Chiapas, donde el asesinato del sacerdote Marcelo Pérez ha puesto de manifiesto la inseguridad en la región, y en Sinaloa, donde conflictos entre grupos criminales han resultado en numerosas muertes desde la captura de un importante líder del cartel.
Sheinbaum ha intensificado la presencia militar y enviado a su secretario de seguridad a la zona, pero expertos cuestionan la efectividad de estas medidas. En paralelo, su administración ha impulsado una reforma judicial polémica, que establece la elección popular de jueces, pero ha provocado un paro en el Poder Judicial, con más de 13,000 casos pendientes. Los trabajadores del sector expresan preocupación por la posible pérdida de independencia judicial.
¡SIGUE NUESTRO MINUTO A MINUTO! Y ENTÉRATE DE LAS NOTICIAS MÁS RELEVANTES DEL DÍA
Además, la presidenta ha decidido continuar con las conferencias matutinas, conocidas como “mañaneras”, utilizadas por su predecesor para abordar temas de interés nacional y conectar con la ciudadanía.
Sin embargo, el éxito de su gobierno dependerá en gran medida de su capacidad para enfrentar los problemas de seguridad y la oposición a la reforma judicial, que ya ha llevado a la renuncia de importantes figuras del Poder Judicial. La presión es alta para que Sheinbaum actúe de manera efectiva en estas cuestiones en las próximas semanas.