Libertad, Democracia, Dictadura, Economía, Estado, Leyes, Normas, Pobreza, Crecimiento, Desarrollo, Participación, Sociedad, Partidos, Reformas, Avance, Retroceso, Limites, Contrapesos, Cultura, Historia, Excesos, Corrupción, Transparencia, Empresarios, Instituciones, Dependencia, Regiones, Bloques, Tecnologías, Geopolítica, Aliados, Competencia, Fronteras, Fortalezas, Debilidades, y otros conceptos más entran en el análisis de la ecuación para resolver la pregunta de cómo diseñar un cambio en el modelo de gobierno e implementar políticas públicas que permita cumplir con el objetivo central de beneficiar al pueblo a la par de resolver los problemas estructurales heredados con la mayor eficacia posible y con los recursos que se tienen disponibles, no con los deseados que no existen. Hace una semana hablamos de Mariana Mazzucato y de su libro “Misión economía. Una guía para cambiar el capitalismo”, en el que la autora plantea la necesidad de tener gobiernos ambiciosos, capaces y con visión, y un nuevo tipo de articulación entre los sectores público y privado y dijimos que generar confianza y certidumbre en el sector privado nacional e internacional es estratégico y parece ser la clave para aprovechar las oportunidades que se le presentan a nuestro país; ahora hablaremos de otro libro que viene al caso por las grandes transformaciones que estamos viviendo en las estructuras institucionales en estos inicios del segundo periodo sexenal de la Cuarta Transformación a cargo de la Presidenta Claudia Sheinbaum.
En esta ocasión me parece oportuno hablar de uno de los libros que escribieron los Premios Nobel de Economía 2024, Daron Acemoglu y James A. Robinson, “The Narrow Corridor: States, Societies, and the Fate of Liberty” cuya traducción al español es “El pasillo estrecho. Estados, sociedades y cómo alcanzar la libertad” (Ediciones Deusto) en el que plantean que “para que la libertad surja y florezca, tanto el Estado como la sociedad deben ser fuertes. Un Estado fuerte es necesario para controlar la violencia, hacer cumplir las leyes y proporcionar servicios públicos que son cruciales para una vida en la que las personas tienen poder para hacer elecciones y luchar por ellas. Una sociedad fuerte y movilizada es necesaria para controlar y encadenar al Estado fuerte”; en su reflexión, argumentan que “hay un pasillo estrecho hacia la libertad. Es en este pasillo donde el Estado y la sociedad se equilibran mutuamente. Es una lucha constante y diaria entre los dos. Esta lucha aporta beneficios. En el pasillo, el Estado y la sociedad no sólo se enfrentan, también cooperan. Esta cooperación genera en el Estado la capacidad de proporcionar cosas que la sociedad quiere y fomenta una mayor movilización social para controlar esta capacidad”. Dicen que “lo que hace que este pasillo sea estrecho es que no se trata de una hazaña fácil. ¿Cómo se puede contener a un Estado que tiene una enorme burocracia, unas fuerzas armadas poderosas y libertad para decidir qué es la ley? ¿Cómo se puede garantizar que, cuando en un mundo complejo se le pida al Estado que asuma más responsabilidad, éste permanecerá moderado y bajo control? ¿Cómo se puede mantener una situación en la que la sociedad trabaja conjuntamente en lugar de volverse contra sí misma, escindida por diferencias y divisiones? ¿Cómo se impide que esto se convierta en una competición suma cero? No es en absoluto fácil, y por eso el pasillo es estrecho y las sociedades entran y salen de él, con unas consecuencias de gran alcance”, se trata de un libro extremadamente interesante y de obligada lectura.
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Aquí en México el nuevo gobierno denominado como el segundo piso de la cuarta transformación ha tomado ya decisiones que apuntan a la continuidad y a la profundización de los cambios; se vive un ambiente político con menos polarización; se percibe un tamiz diferente en la relación con la iniciativa privada nacional y en el fomento a la inversión extranjera; se prepara una nueva estructura gubernamental para atender las necesidades de tener un gobierno ágil orientado a capitalizar la ola mundial de la relocalización de empresas o nearshoring, generar bienestar y desarrollo a través de próximas reformas a la Ley Orgánica de la Administración Pública Nacional; se tomó ya la iniciativa de convocar a las principales empresas asentadas en México y otras nuevas del vecino país del norte, Estados Unidos de América, y vinieron e hicieron anuncios por más de 20 mil millones de dólares que generarán nuevos empleos y oportunidades en el marco del US. México CEO Dialogue; se da inicio a la revisión del T-MEC; se trabaja en un planteamiento de reforzar la infraestructura ferroviaria, de comunicaciones y en ampliar las capacidades tecnológicas; y a la par de todo esto se robustecen también los canales de inclusión social asentados en los procesos democráticos y de participación ciudadana. Tal parece que el gobierno de la Doctora Claudia Sheinbaum interpreta de manera clara las nuevas tendencias mundiales y entiende perfectamente que el Estado debe cambiar y lo está cambiando.
Siguiendo a Daron Acemoglu y a James A. Robinson diremos que “en la medida que el mundo cambia, el Estado debe ampliarse y asumir nuevas responsabilidades, pero esto a su vez requiere que la sociedad se vuelva más capaz y vigilante para en el futuro no salirse del pasillo ….. necesitamos que el Estado desarrolle nuevas capacidades adicionales y asuma nuevas responsabilidades, pero sólo si podemos encontrar nuevas maneras de mantenerlo encadenado, movilizar a la sociedad y proteger nuestras libertades”. En ese sentido, la tarea del Secretario de Economía, Marcelo Ebrard Casaubon, de cumplir con las 6 encomiendas que le ha definido la Doctora Sheinbaum y que a saber son: 1) Preparar la revisión del T-MEC; 2) Apoyar a todas las empresas mexicanas; 3) Acelerar la relocalización de empresas; 4) Reducir el costo de la formalidad; 5) Impulsar los polos de desarrollo; y, 6) Prosperidad compartida, resultan de la más alta trascendencia para todas y todos los mexicanos. Vayamos por un nuevo Estado Mexicano encadenado para que la prosperidad económica se traduzca en bienestar social permanente y duradero.
