La racha sin victorias del Manchester United en todas las competiciones se extendió a cinco partidos después de un empate 0-0 en Aston Villa en la Premier League el domingo, dejando la posición del entrenador Erik ten Hag incierta de cara a un receso internacional de dos semanas.
Ten Hag llegó a Villa Park bajo una enorme presión, ya que el United había perdido tres de sus seis partidos de liga y el propietario minoritario del club, Jim Ratcliffe, no dijo que tenía fe en el entrenador holandés cuando se le preguntó específicamente el viernes.
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Por más meritorio que sea haber sumado un punto en Villa, puede que no sea suficiente para Ten Hag, especialmente ahora que la nueva dirigencia del United tiene dos semanas para evaluar su futuro antes del próximo partido del equipo.
Jugando frente a Ratcliffe y el resto de la jerarquía del United, los visitantes estuvieron más cerca de marcar cuando Bruno Fernandes estrelló un tiro libre en el travesaño en el minuto 68.
El Villa dominó ampliamente, cuatro días después de vencer al Bayern Munich en la Liga de Campeones.
Desde la derrota por 3-0 ante el Tottenham el fin de semana pasado, el United ha conseguido empates en Porto en la Europa League y ahora en un revitalizado Villa.