Trump arremete contra Tim Walz, ‘número dos’ de Harris, al que llama “izquierdoso radical”

La campaña de Trump aseguró que Tim Walz, candidato a vicepresidente de Kamala Harris, “es un peligroso extremista de izquierda”

La campaña del expresidente de Estados Unidos y candidato presidencial republicano, Donald Trump, arremetió contra la elección del gobernador de Minesota, Tim Walz, como candidato a vicepresidente de la nominada demócrata Kamala Harris y lo calificó de “izquierdoso radical”.

“Si Walz no les dice la verdad a los votantes, nosotros lo haremos: al igual que Kamala Harris, Tim Walz es un peligroso extremista de izquierda”, expresó en un comunicado Karoline Leavitt, secretaria de prensa de la campaña de Trump.

Walz fue elegido por la actual vicepresidenta y candidata a la Casa Blanca, Kamala Harris, horas antes de comparecer juntos por primera vez en público en un mitin en Filadelfia, en el estado clave de Pensilvania.

Los trumpistas afirmaron que el proyecto político de Walz al frente de Minesota, en el Medio Oeste del país, ha consistido en “remodelar” su estado “a imagen” de California, tierra de Kamala Harris y considerada meca de la izquierda para los republicanos.

“Aunque Walz finge apoyar a los estadounidenses del corazón del país, cuando las cámaras están apagadas, cree que la América rural está en su mayoría ‘compuesta de vacas y rocas’”, afirmó la campaña.

Para los republicanos, Walz es un peligro porque ha propuesto “estándares de emisiones más estrictos para los automóviles de gasolina y políticas que permitan votar a los delincuentes convictos“.

“Walz está obsesionado con difundir la peligrosa agenda izquierdista de California en todas partes”, lo cual “es una pesadilla para todos los estadounidenses”, insistió la campaña.

Walz, de 60 años, es considerado el más progresista de la lista de aspirantes que tenía Harris, en la que también figuraban el gobernador de Pensilvania, Josh Shapiro, y el senador de Arizona Mark Kelly.

El gobernador de Minesota, que fue profesor de instituto antes de dedicarse a la política, presume de haber aprobado comedores gratuitos para los colegios del estado, y ha recibido el respaldo del senador demócrata Bernie Sanders, del ala más progresista del partido.