El lanzador sinaloense, ex Dodgers de Los Ángeles, fue arrestado el pasado 3 de septiembre acusado de violencia doméstica en contra de su pareja; MLB ordenó su baja administrativa días más tarde.
Julio Urías, el ex lanzador abridor de Dodgers de Los Ángeles en las Grandes Ligas de Beisbol (MLB), fue acusado de cinco delitos menores derivados de su detención por sospecha de violencia doméstica en septiembre de 2023, según confirmó un portavoz de la oficina del fiscal de Los Ángeles en información recogida por Los Angeles Times.
Los cargos de los que se le acusa son un cargo de agresión conyugal, dos cargos de agresión doméstica en una relación de pareja, un cargo de detención ilegal y un cargo de agresión, para los cuales se tiene previsto comparezca el próximo 02 de mayo.
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Urías, de 27 años y nacido en Culiacán, se encontraba a pocos meses de recibir una lucrativa extensión de contrato por los angelinos cuando fue arrestado fuera del BMO Stadium de LA, después de un partido del LA Football Club (LFC), el 3 de septiembre.
El arresto se dio luego de que se alertara a la policía que un hombre (Urías) y una mujer (su pareja) estaban involucrados en un altercado físico, según el informe del Departamento de Seguridad Pública de Exposition Park. Los agentes de la policía “determinaron que se había producido el altercado” y procedieron a la detención del serpentinero, que a la mañana siguiente salió bajo fianza por un monto de 50 mil dólares.
Tras darse a conocer los hechos, los Dodgers cortaron relaciones con Urías, quien permaneció el resto de la temporada en licencia administrativa. Ningún equipo mostró interés en firmar al lanzador tras la expiración de su contrato en noviembre del año pasado y se espera que, según las investigaciones de la policía, pueda ser sancionado por la MLB, quienes investigan por su parte si incurrió en violaciones a su política de comportamiento por segunda ocasión.
En 2019, fue suspendido 20 juegos tras ser arrestado, más no acusado, por violencia doméstica. De ser encontrado como culpable, sería el primero en la historia de la liga en ser suspendido dos veces bajo las políticas de violencia y agresión sexual de la Gran Carpa.
El martes, en torno a estos nuevos cargos, un portavoz de la MLB aseguró que la investigación “está en curso”, pero se reservó hacer más comentarios al respecto.
En enero, la oficina del fiscal del condado se negó a acusar al culichi de cargos por delitos graves, considerando que empujar a su esposa contra una valla y “tirar de ella por el pelo y hombros” era una agresión, más “ni las lesiones de la víctima ni los antecedentes penales del acusado (Urías) justifican la imputación de delito grave”.
La sentencia máxima para cada uno de los cuatro primeros de los cargos es de un año en la cárcel del condado, según la oficina del fiscal de la ciudad. Una condena por agresión conllevaría una pena máxima de seis meses en la cárcel del condado.
Después de un incidente similar en 2019, los fiscales acordaron no presentar cargos si Urías aceptaba completar un programa de asesoramiento. Debido a que los cargos no se presentaron entonces, dijo Shapiro, el tribunal consideraría este incidente como un primer delito.
