Sobriedad de pareja: la nueva tendencia de las personas sin relaciones románticas

La llamada sobriedad de pareja ha llegado a la sociedad moderna para replantear los estereotipos que han existido por años en torno a cómo debemos relacionarnos con otras personas y sobre cuáles son las expectativas que debemos tener en la vida en pareja.

Y es que actualmente, en muchos ámbitos de la vida las personas comienzan a cuestionarse las tendencias que hemos aceptado como únicas a lo largo del tiempo. Por ejemplo, el consumo de alcohol como la única bebida presente en eventos sociales y ahora, la vida en pareja como única posibilidad de rutina.

Ahora, una persona puede decidir si quiere o no tomar alcohol, si quiere descansar un mes o un año de estas bebidas o si decide hacerlo de manera definitiva y, de manera similar, también hay quienes están en defensa de esta posibilidad de voluntad para las decisiones que incumben a las parejas, permitiendo a la gente elegir entre descansar de un vínculo por un tiempo determinado o simplemente a largo plazo.

Después de todo, las relaciones de pareja pueden ser muy enriquecedoras y estimulantes, pero también llegan a ser cansadas cuando absorben demasiado tiempo y energía de alguien, no solo por el tiempo que pueden exigir de una persona para compartir momentos de calidad, sino también por las emociones que demandan, los compromisos y en muchos casos, también los sacrificios, sobre todo cuando los esquemas son monógamos, por ejemplo, y una relación puede incluso influir en el nivel de intimidad que podamos o no tener con una amistad.

Además, para muchas personas el tener una relación sentimental también influye en la estabilidad mental que cultivan, ya que cuando hay problemas de pareja, la rutina se ve afectada y la calidad de vida también se permea, por lo que quienes deciden probar la sobriedad de pareja muchas veces también desean un estilo de vida menos conflictivo.

Cabe aclarar que una persona puede elegir por cuánto tiempo desea practicar la sobriedad de pareja, decisión que puede durar desde un mes hasta un año o más, según los anhelos de quien decide poner a prueba esta tendencia. Por ejemplo, una persona puede decidir explorar la sobriedad de pareja porque tiene una meta concreta como ahorrar dinero para un viaje o terminar un proyecto creativo, incluso una tesis. También alguien puede optar por la sobriedad de pareja como mecanismo de trabajo emocional, para confrontar sentimientos personales o vivir algún duelo. La lista de motivaciones es amplia y variada, así como las formas de poner en práctica esta nueva propuesta.

Lo que sí, es importante conocer las razones por las que alguien decide explorar la sobriedad de pareja para poder comunicarlas de forma asertiva a las personas con las que se vincula.