Síndrome del túnel del carpo

(Osiak K et al. Folia Morphol. DOI: 10.5603/FMa2021.0121; resumió Morales I, internista y residente de la super-especialidad de Reumatología, Facultad de Medicina y Hospital Central)

El diagnóstico de síndrome del túnel del carpo (STC) se considera ante parestesias nocturnas y/o dolor neurítico en los 3º a 5º dedos radiales; se ratifica con estudios de electro-diagnóstico.

El STC afecta 7-16% de la población adulta, representa el 90% de todos los síndromes de compresión nerviosa y ocurre más en mujeres entre 45-64 a. Los factores de riesgo incluyen a lo ocupacional con fuerza, flexión y extensión repetitivas de muñeca y exposición a vibraciones, además de embarazo, menopausia, obesidad, insuficiencia renal, hipotiroidismo, anticonceptivos orales e insuficiencia cardíaca, que aumentan el volumen de la vaina sinovial dentro del túnel. Las fracturas directas del radio distal, la artritis, tumores postraumáticos, quistes ganglionares o arteria mediana persistente también pueden alterar el contorno del túnel; además es más común el STC en diabetes, alcoholismo, deficiencia de vitaminas y exposición a toxinas. Depósito de material mucopolisacárido y amiloidosis pueden asociarse al STC, esta última es bilateral y precede la afectación cardíaca y multisistémica; se ratifica ante biopsia o toma de tejido tenosinovial.

Parestesias nocturnas de aparición irregular que se vuelven frecuentes cuando la persona que lo sufre está despierto. Hay 3 etapas del STC: temprana, con sueño alterado con parestesias de manos y sensación de “hinchazón”. En 2° etapa, con síntomas durante el día, puede haber torpeza al agarrar un objeto. La 3° etapa se asocia a hipotrofia o atrofia de la eminencia tenar (músculos de la mano).

Tratamiento. Incluye inmovillización de la muñeca, inyecciones locales de glucocorticoides y medicamentos orales, uso de férula rígida. El uso de prednisona ha mostrado algún beneficio, pero no los anti-inflamatorios no esteroideos ni diuréticos.

La cirugía de elección es la descompresión simple del nervio mediano con abordaje abierto o endoscópico; se selecciona ante la ausencia de respuesta adecuada o resolución de las causas. En términos de resultado funcional a largo plazo, no existe diferencia significativa entre la cirugía abierta y endoscópica. La liberación endoscópica es más costosa y se asocia con tasas más altas de daño nervioso transitorio. La tasa de fracaso oscila entre el 3% y el 20%.

Tendencias y los riesgos que marcarán el desarrollo de la inteligencia artificial (IA) en la educación (Meneses N, El País, España)

Las herramientas de IA seguirán implementándose, pero con cada oportunidad vendrán también peligros que hay que afrontar; la IA ha llegado para quedarse y el hecho de que sus inmensas posibilidades acaben suponiendo una ventaja o un contratiempo, depende enteramente de cómo decidamos afrontar el desafío que representa y el adaptarse es indispensable.

Las posibilidades de la IA en el ámbito educativo son, como en tantos otros, casi infinitas, facilitan un aprendizaje más dinámico y personalizado, según el ritmo y los intereses de los propios estudiantes; la automatización de las tareas más administrativas y la creación de materiales y recursos educativos, entre muchas otras ventajas. Desde el punto de vista del docente, es ya una herramienta de gran ayuda a la hora de elaborar programaciones didácticas o presentaciones para seminarios.

“El despliegue de la IA en la educación ofrece oportunidades tanto de personalización del aprendizaje como de atención a la diversidad, mejora el proceso de acompañamiento e impacta sobre determinados colectivos”, puede ayudar a potenciar o, por el contrario, inhibir, el pensamiento crítico de los estudiantes, “lo que, en el segundo caso, conduciría al aumento de las brechas de desigualdad preexistentes”.

Vídeos multilingües con avatares, que pueden ofrecer una experiencia educativa más personalizada y accesible a escala global, podemos imaginar que facilitarán el acceso a la educación en diferentes idiomas, sin barreras lingüísticas y geográficas.

Ayuda en la preparación de asignaturas, herramientas útiles para elaborar planificaciones didácticas; a encontrar ideas para trabajar competencias transversales; innovar en metodologías docentes; encontrar actividades y recursos educativos en internet; o facilitar la evaluación de los alumnos.

La IA generativa puede ayudar a los alumnos a desarrollar habilidades de resolución de problemas, muy valoradas en el mercado laboral; no es tan relevante el qué conoce el alumno, cuanto el modo en que ello le ayuda a identificar y resolver problemas; en el caso de los trabajos académicos, “quizá resulta más importante que el propio trabajo o su exposición oral, la capacidad del alumno para responder con argumentos a las preguntas del profesor (o del tribunal)”.

Como mencionamos, la adopción de la IA no implica solo ventajas y posibilidades, sino también numerosos riesgos; por parte del profesorado puede, por ejemplo, llevar a una delegación desmedida de funciones propias de los docentes; y como una IA es tan buena como la información que se le ha suministrado para entrenarla, podría también darse el caso de que fuera víctima de ciertos sesgos que hicieran que la información obtenida no sea del todo precisa. La gestión de datos confidenciales de los estudiantes y las instituciones puede, por otra parte, representar un desafío si no se cuenta con protocolos de seguridad establecidos.