Hace un par de días se reveló que la Oficina del Fiscal de Distrito del Condado de Los Ángeles determinó que no presentará cargos por delitos graves contra el ex pitcher de Los Angeles Dodgers, Julio Urías.
El incidente en el que se vio involucrado Julio Urías ocurrió en el BMO Stadium tras un partido de futbol entre LAFC y el Inter Miami; el beisbolista fue arrestado bajo sospecha de violencia doméstica en septiembre pasado.
Ahora se enfrentará a posibles cargos por delitos menores, los cuales serán determinados por la Fiscalía de la Ciudad de Los Ángeles. Hasta que se tome una decisión, la Major League Baseball (MLB) pospondrá la imposición de una posible suspensión de Urías, de acuerdo a Alden González de ESPN:
“Major League Baseball, que inició una investigación independiente sobre el incidente, probablemente esperará hasta que la Oficina del Fiscal de la Ciudad se pronuncie antes de determinar una posible suspensión.”, reza la información.
Antes de su arresto, se proyectaba que el pitcher hubiera recibido un contrato de 200 millones de dólares, por ahora su futuro se mantiene en el aire.
No es la primera vez que el jugador se encuentra en esta situación
Julio Urías fue arrestado previamente en mayo de 2019 por presunta violencia doméstica, pero no se presentaron cargos; es el primer jugador que enfrenta una acción disciplinaria por segunda vez bajo la política de violencia doméstica de la liga (que se implementó en agosto de 2015).
