Muere a los 100 años Henry Kissinger

  • Kissinger sirvió bajo las Administraciones de Richard M. Nixon y Gerald Ford como secretario de Estado, donde desempeñó un papel fundamental en el fin de la Guerra de Vietnam y el golpe de Estado de Pinochet en Chile, entre otros asuntos globales

Henry Kissinger, probablemente el más influyente secretario de Estado en la historia de Estados Unidos, falleció a los 100 años.

Kissinger, quien fue una figura fundamental durante la Administración del presidente Richard Nixon, ejerció una influencia capital en la política exterior del país y fue artífice del acuerdo de paz durante la Guerra de Vietnam.

Considerado una figura cimera de la diplomacia estadounidense, Kissinger tuvo a lo largo de su vida igual número de admiradores como detractores por su labor en las altas esferas del Gobierno.

Tras su retiro de la vida pública, era frecuentemente consultado sobre temas de política exterior por parte de figuras de la política y entrevistado en los principales programas de debate político en la televisión nacional.

El diplomático nació en el sur de Alemania en 1923, donde su padre era profesor, según un comunicado enviado por Kissinger Associates, Inc.

El texto amplió que su familia huyó de la Alemania Nazi y llegó a Estados Unidos en 1938 y tras adquirir la nacionalidad estadounidense en 1943, Kissinger sirvió en la 84 División del Ejército de 1943 a 1946.
«Fue condecorado con la Estrella de Bronce por su ‘meritorio servicio’. Posteriormente, el Dr. Kissinger sirvió en el Cuerpo de Contrainteligencia en la Alemania ocupada. Estuvo en la reserva del Ejército estadounidense hasta 1959», amplió el comunicado.

En 1969, el entonces presidente Nixon lo nombró consejero de Seguridad Nacional. Posteriormente, ocupó el cargo de secretario de Estado en las administraciones de los presidentes Nixon y Ford.

Kissinger llegó a ser considerado uno de los principales diplomáticos e intelectuales de las relaciones internacionales del siglo XX, un exponente de la realpolitik [una filosofía de política exterior marcada por el pragmatismo, muchas veces cruzando principios morales] que orquestó la normalización de las relaciones con China y ayudó a aliviar las tensiones entre Estados Unidos y la Unión Soviética.

Kissinger ganó el Premio Nobel de la Paz por negociar el acuerdo que puso fin a la guerra de Vietnam, y recibió el galardón conjuntamente con Le Duc Tho, de Vietnam del Norte, quien rechazó el honor. También contribuyó a abrir las relaciones diplomáticas entre Estados Unidos y China bajo la Aadministración Nixon a principios de la década de 1970.

Pero también fue una de las figuras públicas más vilipendiadas de su época, cuyo legado está inextricablemente ligado al derramamiento de sangre en todo el mundo. A los ojos de sus críticos, era sinónimo de la brutalidad del poder estadounidense y de algunas de las decisiones de política exterior más costosas de la historia moderna.

Los detractores de Kissinger le denunciaron por el papel central que desempeñó en la expansión de la participación militar estadounidense en Vietnam, la campaña de bombardeos a gran escala en Camboya y el apoyo a regímenes brutales en Argentina, Chile, Indonesia y Pakistán. Los críticos más acérrimos de Kissinger le tacharon de criminal de guerra, y algunos pidieron que se le acusara ante La Haya.

Kissinger se retiró del servicio en el Gobierno en el año 1977.

En entrevistas en torno al centenario de su natalicio en mayo, Kissinger dijo que muchos líderes mundiales, incluidos el presidente chino, Xi Jinping, y el presidente ruso, Vladimir Putin, probablemente responderían su llamada si los telefoneara sin avisarles antes.

Le sobreviven su esposa de casi 50 años, Nancy Maginnes Kissinger, dos hijos de su primer matrimonio, David y Elizabeth, y cinco nietos.