Efecto Miguel Ángel en relaciones de pareja

Te adelantamos que se trata de un efecto positivo que se da en algunas relaciones de pareja y que es muy beneficioso para sus integrantes. Por esta razón, conviene conocerlo más a fondo. No obstante, no siempre es posible conseguir este efecto Miguel Ángel, aunque en muchas ocasiones se utiliza en terapia con muy buenos resultados.

¿Qué es el efecto Miguel Ángel?

El efecto Miguel Ángel es un proceso que se da en aquellas parejas que se van modelando en función de lo que se conoce como «yo ideal». De esta forma, cada integrante consigue llegar a desarrollar ese yo, su mejor versión. Este efecto es muy positivo porque se da al mismo tiempo, ya que cada miembro de la relación apoya al otro en su camino hacia ese «yo ideal».

Reforzar los logros de la otra persona, alentarle a que continúe esforzándose por alcanzar sus metas… Todo esto permitirá una evolución clara y positiva que repercutirá en la propia relación. Este efecto se da de manera recíproca para que ambos integrantes puedan avanzar y se encuentren siempre en el mismo punto. Es un claro ejemplo de relación sana.

¿Qué es el «yo ideal»?: El concepto de «yo ideal» es aquello a lo que, seguramente, aspiras. Por ejemplo, si una persona se considera divertida y su pareja refuerza esto compartiendo su sentido del humor, esta parte de su carácter se verá reforzada. En el caso de que su pareja se mostrase fría y no entendiese sus bromas, sucedería todo lo contrario.

Para el que el efecto Miguel Ángel funcione debe haber una conexión importante con la otra persona; es decir, los valores deben coincidir, también el sentido del humor, determinados pensamientos, etc. Así, cada persona dentro de la pareja se va a sentir satisfecha y feliz. Si alguien con sentido del humor deja de bromear porque su pareja no comparte esto, será difícil llegar a esa felicidad.