En el boxeo son pocos los que llegan a ser ídolos.
Julio César Chávez cumplió sesenta años de vida y no deja de sorprenderse por las grandes muestras de cariño que recibe por parte de los aficionados, ya sean mexicanos o extranjeros; sin embargo, tiene claro que dichos detalles no se consiguen ni con todo el dinero del mundo.
Y aunque reconoce que no le gustan las comparaciones en el mundo del boxeo, considera que éstas en algún momento pueden ser buenas para un pugilista en activo, como es en la actualidad el caso del Canelo Álvarez, quien busca triunfar en el pugilismo para ganarse el reconocimiento del público.
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“Yo la vivo tranquilo (la comparación con el Canelo), las comparaciones nunca han sido buenas, pero siempre las habrán… el día que yo ya no esté en esta vida, va llegar otro boxeador y va a suplir al Canelo, y entonces van a tratar de compararlo con el Canelo y conmigo.
“Pero las comparaciones a veces son buenas para el boxeador activo, porque el Canelo por más dinero que tenga, él quiere el cariño de la gente, él quiere el reconocimiento como peleador, ¡y se lo merece! porque él lo está buscando.
En su momento cuando yo peleaba estaba Rubén Olivares, y decían que Olivares esto y el otro, después llegué yo y lo superé.
En el boxeo son pocos los que llegan a ser ídolos… pasan los años y es increíble el cariño de la gente, luego me los encuentro y hasta lloran y me da pena”, explicó El Gran Campeón en charla con ESPN.
Disfruta su presente Julio César Chávez explicó que está en plenitud ahora que cumplió sus sesenta años de vida, máxime a que está alejado del alcohol y las drogas, situación que ha aprovechado para ayudar a personas que están inmersas en las adiciones, logro que incluso considera está por encima de sus conquistas en el boxeo.
“Me siento bendecido por Dios, pasan los años y la gente más me arropa, más me quiere, entonces el cariño es de todo el mundo, no solo de los mexicanos, a cualquier parte que voy es increíble.
la gente cómo me reconoce por mis peleas. por lo que hago actualmente de ayudar a muchísima gente que ha tenido el mismo problema que yo tengo.
“Dios me dio otra oportunidad de vida y la he sabido aprovechar, con altibajos o momentos difíciles, pero gracias a Dios he podido salvar muchas vidas, gracias a mi recuperación, porque ellos me ven y dicen que si yo pude cómo ellos no van a poder. He sido una inspiración en el boxeo, pero ahorita lo más importante es salvar vidas”.
