Oppo Reno Z: el gigante chino demuestra fondo de armario con su smartphone de gama media

Oppo desembarcó el pasado año en España con una propuesta innovadora en la que sus gamas altas demuestran valentía en ciertas innovaciones de hardware como pantallas o cámaras, un escaparate para demostrar de lo que son capaces. Sin embargo, la gigantesca compañía china también cuenta con una interesante gama media, un fondo de armario con el que demuestran estar interesados en todas las categorías del mercado.
El último ejemplo de su estrategia es el Oppo Reno Z, el tercer smartphone de la familia, que llega con unas características solventes ajustándose a un precio de 349 euros. El Reno Z demuestra que la compañía cuenta con un fondo de armario interesante, que rinde con soltura y con el que busca ser la alternativa a otras marcas chinas.
Cuenta con un diseño llamativo y funcional, curvado en la parte trasera para facilitar el agarre, mientras que en la parte frontal cuenta con un panel AMOLED de 6,4 pulgadas con un ratio de pantalla del 92% gracias a un notch en forma de gota. Unas líneas que recuerdan al OnePlus 6T.
Eso sí, a diferencia de éste, cuenta con puerto para auriculares y sus cámaras traseras están unificadas con el chasis y no sobresalen con lo que la compañía ha implantado el relieve cerámico O-Dot con la idea de protegerlas frente a golpes y arañazos. Aunque en un primer momento este punto hace pensar en un sensor ToF, en la parte trasera cuenta con una doble lente de 48 y 5 megapíxeles con tecnología de pixel 4 en 1, una apertura de f/1,7 que pone el acento en las tomas nocturnas gracias a la implementación del mejorado a través de software.
Por su parte, en la parte delantera opta por una cámara de 32 megapíxeles que rinde bien y que da al usuario cierta versatilidad para jugar en los selfies gracias a filtros, colores y un modo retrato con cinco tipos de bokeh que, en general, funciona con soltura.
Potencia acorde a su precio
Oppo ha optado en este terminal por no apostar por un procesador Snapdragon, sino que monta el Helio P90, la alternativa a Qualcomm para equiparse en la gama media de Mediatek.
Cumple en rendimiento y se mueve con soltura en la mayoría de desempeños, aunque parte de la falta de fluidez ocasional se puede achacar a ColorOS, la capa de personalización de Android que necesita subir un escalón en velocidad tras las optimizaciones de la competencia.
Eso sí, el Oppo Reno Z cuenta con la optimización del sistema Game Boost 2.0 con la que se puede jugar mejor gracias a la optimización de la latencia, la reacción táctil y la frecuencia de actualización. En concreto, ha mejorado la lag con el PUBG y la respuesta táctil con el Arena of Valor. El Helio P90 se complementa con 4 GB de RAM, una capacidad suficiente para rendir con soltura en el uso normal del teléfono y dispone, y monta 128 GB de almacenamiento que se hace complicado de llenar con fotos y vídeos por más archivos de WhatsApp que nos manden.
Un gran punto a favor del Oppo Reno Z es su batería. Monta una de 4.035 mAh con la que se llega a final del día de forma amplia. Sin embargo, el verdadero punto a favor del teléfono es su tecnología de carga Vooc 3.0 capaz de cargar casi la mitad de la batería del teléfono en los primeros cinco minutos, una solución especialmente cómoda que permite recargar el teléfono con la batería justa para la jornada en muy poco tiempo.