Soluciones para los talones secos y agrietados

Caminar descalzo en casa y en la playa es recomendable sin abusar.

Sobre las grietas, desde el Icopcv indican que se suelen producir en zonas de roce como son los dedos, los talones o los laterales del pie cuando están deshidratados. La fricción constante con el zapato es la que produce una alteración de la capa superficial de la piel y de sus células “despegadas” del resto de capas. Por ello, es fundamental realizar una rutina de hidratación diaria que mantenga la piel flexible y nutrida.

Si ya han aparecido la sequedad y las grietas en los talones, hay que encontrar el origen del problema y resolverlo. El uso de cremas con urea en estadios iniciales puede ser una buena opción, como también lo es la vaselina o cremas con este producto, y el ácido hialurónico. Si existe grieta que molesta o está abierta, debe revisarlo un profesional universitario especialista en el pie”, aconseja la presidenta del Icopcv.

La podóloga advierte de que “las grietas pueden ser zonas deshidratadas o esconder enfermedades de la piel como eccemas, psoriasis o tiñas y, en este caso, limarlas es muy contraproducente porque podría aumentar la gravedad de la patología. En estos casos, el tratamiento no requiere un limado de la zona, sino la aplicación de ungüentos específicos que traten la patología”.

Es más, “el uso de limas para los talones secos y agrietados se desaconseja en la mayor parte de los casos, porque muchas personas no saben hasta dónde hay que lijar».

Caminar descalzo en casa y en la playa es recomendable sin abusar. En la playa, siempre por arena mojada y dura, evitando zonas inclinadas que pueda crearnos inestabilidad y, con ello, molestias articulares.