Sexo en personas mayores

Podríamos pensar que si no hablamos de la sexualidad en la vejez, es porque las personas mayores no disfrutan ni hacen uso de su sexualidad.

Ni en películas ni en series de televisión solemos ver escenas de sexo entre personas de más de 60.

Tampoco se sexualizan sus cuerpos en anuncios o revistas.

La tercera edad no vende y mucho menos, su representación como seres sexuados, deseantes y deseables.

Aspectos vitales en estas edades a tener en cuenta ya que pueden afectar en la vivencia de sus sexualidades serían cuando una persona se queda viuda porque pierden una fuente importante de afecto o cuando la persona se jubila, que tiene que realizar un cambio de roles y reestructurar su vida entera.

A esta edad ligar se complica pero no es imposible: hay grupos de mayores que se juntan para realizar actividades de ocio y tiempo libre incluso en las residencias o centros de día hay quienes han encontrado pareja.

A pesar de ello, las instituciones tendrían que revisarse cómo facilitan o no las vivencias de las sexualidades con los mayores que atienden.

Igual que dejar de ser fértiles, tampoco va a influir en nuestro gozo.

Podemos decir que las personas que tienen genitales femeninos (sexo biológico) notan que hay una disminución de la lubricación vaginal y su respuesta ante estímulos sexuales es más lenta.

En personas con genitales masculinos (biológicamente hablando), la respuesta de erección también es más lenta, la erección suele ser menos firme, también la intensidad de la eyaculación y el orgasmo es menor.

Con este panorama hay quienes se despiden aquí de las relaciones sexuales “adiós pene, adiós coito, DEP”. ¿Por qué ocurre esto? Porque hay quienes piensan que el sexo es coito, y que la sexualidad sólo se puede disfrutar a través de los genitales. ¿Os suena?

En cambio aquellas personas mayores que hayan cultivado una vida erótica más allá del coito, que sepan poner todo el cuerpo a disposición del placer, que no gire todo alrededor del pene, que sepan dónde está el clítoris y cómo estimularlo, que se diviertan dentro y fuera de la cama,…. seguirán teniendo una vida erótica satisfactoria adaptándose a los cambios vitales y corporales.