“…Primero hay que tomar en cuenta que es el pueblo quien va a decidir, ahora del flanco progresista liberal hay muchísimos como Claudia (Sheinbaum), Marcelo (Ebrard), Juan Ramón de la Fuente, Esteban Moctezuma, Tatiana Clouthier, Rocío Nahle, bueno muchísimos, afortunadamente hay relevo generacional”.
comentario sobre el tema de la sucesión presidencial, del Presidente de México Andrés Manuel López Obrador, en La Mañanera.
Hace ya algunas semanas que el Presidente de la República saco a la luz pública algunos nombres de sus correligionarios a lo que, en términos coloquiales se conoce como pasarela para la sucesión Presidencial.
Hábil como siempre, el mandatario omitió a algunos y puso a muchos, lo primero con la finalidad de mandar mensajes y lo segundo para arropar y esconder a su verdadero delfín, la Jefa de Gobierno de la Ciudad de México Claudia Sheinbaun.
Acto seguido la titular del Gobierno Capitalino se convirtió en eje de los eventos palaciegos, así como de visitas de Gobernadoras, Legisladoras electas y otras “fuerzas vivas” de su Partido; sin embargo, por mas arropamiento que el Presidente le dio, queda claro para todos que el Ejecutivo Federal solo tiene dos posibles perfiles para decidir ¡Claudia y Sheinbaun!; en los siguientes días las baterías se enfilaron sobre la Jefa de Gobierno, entrando en una vorágine de desgaste directo, poniendo en riesgo la apuesta del Presidente y con ello su programa y proyecto.
En este orden de ideas el Presidente López Obrador movió un a pieza más en el ajedrez de la sucesión, regresando al Senado a la Magistrada en Retiro y Secretaría de Gobernación Olga Sánchez Cordero, sustituyéndola por un aliado incuestionable Adán Augusto López Hernández, Gobernador – hasta ese momento- de Tabasco.
Muchos pensaron que el nombramiento del Licenciado Adán Augusto fue para fortalecer la acción política del Gobierno Federal y puede ser, pero no en su totalidad.
El nombramiento del nuevo Secretario de Gobernación desde mi punto de vista responde, sí, en parte a la necesidad de fortalecer la acción política del Gobierno Federal, pero también para no quedarse sin cartas en caso de que Claudia Sheinbaun, ante lo adelantado del proceso no resista los embates.
CONCLUYENDO.
- Ni duda cabe que el proceso sucesorio, adelantado o no, para bien o para mal, ya inicio.
- Gustoso de las prácticas tradicionales de la Política mexicana el Presidente, está cuidando no quedarse sin cartas del corazón y entonces
tener que decidir por descarte. - Del mismo modo que actuó para juntar a la oposición en la pasada elección, el titular del Ejecutivo Federal ahora juega a fortalecer la imagen de Ricardo Anaya a efecto de que el PAN se equivoque y no vaya en la alianza para el 2024.
- Esto apenas comienza, hay que hacer las apuestas.
