Novela recupera la historia de un mexicano atrapado por los nazis

Julio Godínez consultó archivos de Francia, Alemania y México para indagar en la experiencia de José Luis Salazar en un campo de concentración.
Julio Godínez

El periodista Julio Godínez le dio forma de ficción a la historia.

Allá por 2014, Jorge F. Hernández publicó la columna “México en Auschwitz”, en la que hablaba de un corredor soleado en el campo de concentración que era conocido por los presos como “Mexiko”.

Esa Agua de azar la leyó el periodista Julio Godínez, quien le pidió autorización al escritor para acercarse a la historia: le dio coordenadas, lo puso en contexto y a partir de ello trabajó en una historia, a la que ahora se suma otra perspectiva del Holocausto.

“Son historias que estaban por ahí, a la espera de ser atrapadas. Lo mismo me sucedió con José Luis Salazar y Juan Rodrigo del Fierro, a cuyas vidas les di forma de ficción, aunque ya resultaban conocidas por un archivo que se publicó en 2014: más que las historias venían los nombres de los dos personajes, quienes no eran militares ni gente que estaba con el ejército o con los aliados, pero habían estado en el campo de concentración de Buchenwald”.

Así surgió la novela El mexicano de Buchenwald. La desconocida y valiente historia de uno de los pocos mexicanos capturados por los nazis (Planeta, 2021), la cual tenía unos antecedentes en un trabajo periodístico de la revista Proceso, dice el autor.

“Sin embargo, cuando leí el reportaje me saltaron varias inconexiones de las declaraciones de los personajes: uno de ellos, por ejemplo, dijo que era de un lugar llamado El Paso, México. Se refería a El Paso, Texas”.

“Dicen los que saben que las muy buenas historias nacen de las anécdotas. Una anécdota por sí misma es una historia, por su naturaleza tiene toda la complejidad de una trama entera y lo que sucedió con ambos podía ser un hecho anecdótico, un par de mexicanos que llegaron a un campo de concentración en 1944, sin embargo, necesitaba saber qué tan profundo podemos ir en esas historias”.

El libro está construido a partir de estas dos historias que corren en paralelo, que merecen la pena ser conocidas, primero investigadas, por el gran público, a decir de Julio Godínez, más allá de tratarse de una obra que apuesta por la ficción.