Los pendientes del gobierno que se va

La administración estatal que está a punto de “cerrar cortinas”, ha sido calificada por sus críticos por incumplir sus compromisos en materia de seguridad, en educación, en salud y entre otros rubros haber dejado inconclusas varias de sus obras públicas emblemáticas en su gestión, como la Red de Transporte Público, la vía alterna a la carretera 57 y el equipamiento de la nueva torre del Hospital Central.

También quedaron pendientes obras y acciones que demandaban sectores sociales que por décadas han vivido en la marginación y el abandono.

Primero. La obra de agua y drenaje para el ejido de Escalerillas, que desde que se fundó esta comunidad (hace más de 100 años) jamás han contado con estos servicios indispensables. En los últimos meses la Comisión Estatal del Agua, impulsó la construcción del servicio de agua entubada a los domicilios de los escalerillenses, y de igual manera, la introducción de la red de drenaje, alcantarillas y la construcción de una planta tratadora de agua, es una obra millonaria, que tenía completa suficiencia presupuestaria para que se llevara a cabo, sin embargo, en las últimas semanas la obra se detuvo, por la falta de licitación de una de las etapas finales de la obra, y ahora se espera que la próxima administración estatal le dé seguimiento a la terminación de la obra.

Segundo. La regularización de la colonia Buenos Aires de Ciudad Valles, asentamiento donde viven más de 300 familias, y que al principio de la administración aún actual, hubo el compromiso de que se realizarían los trámites respectivos para que se respetaran los derechos patrimoniales y de posesión de los vecinos del lugar, que desde a finales del siglo pasado, debido a que una veintena de personas que se dicen ejidatarios del núcleo ejidal Plan de Ayala, les empezaron a disputar las tierras que tienen los colonos de Buenos Aires, no se les han regularizado sus predios, pese a que los vecinos cuentan con títulos de propiedad notariados y con plano debidamente registrado y certificado por las autoridades municipales de aquella época. Este es el motivo, a que desde hace décadas las autoridades de los tres niveles de gobierno les nieguen cualquier tipo de apoyo e introducción de servicios en su colonia. En este fraccionamiento no hay el servicio de agua, de drenaje y de energía eléctrica, sus calles no están pavimentadas; no cuentan con centro de salud o escuelas. Pareciera como si fuera un campo de concentración o de exterminio de los que sobreviven allí.

Pues bien, ante todo esto y mucho más de lo que sufren y han padecido durante décadas los vecinos de la Buenos Aires, pidieron el apoyo y auxilio de mis compañeros antorchistas y después de muchas gestiones, incluso, acciones de protesta ante Promotora del Gobierno del Estado, en la cual se logró que a fines del año pasado se concluyeran todos los trámites y entrega de documentación requerida de los peticionarios, para que finalmente, se resolviera la petición de terrenos debidamente legales para que vivan con tranquilidad y en paz en su asentamiento; sin embargo, no hubo respuesta.

Mis compañeros de la Buenos Aires, no quieren una respuesta de que ya se “cerraron cortinas”, y que ahora lo resolverá el nuevo gobierno, fueron cerca de 6 años de espera con la actual administración, y piden respuestas serias y concretas a su petición.

Lo que sí es seguro, es que, los vecinos de la Buenos Aires, estarán en esta ciudad protestando por tanta burla y engaño de lo que han sido objeto, como lo fueron las manifestaciones de la semana pasada. Y claro, todo el antorchismo estatal, estaremos con nuestros compañeros de Ciudad Valles apoyándolos. Que conste.