Indagan en jerarquía de los dioses totonacos

A través de un libro, el lingüista Héctor Manuel Enríquez reúne y reconstruye información de dichas deidades tratando de explicar un orden que permita comprender la manera en que los totonacos conciben el mundo 

El lingüista Héctor Manuel Enríquez reunió y reconstruyó información sobre los dioses totonacos, como en un gran rompecabezas, en el que desafortunadamente dice faltan piezas y existen otras que aparentemente no embonan, pero que se tienen que conservar en espera de que aparezcan más pistas.

En su libro «La jerarquía de los dioses totonacos» que dará a conocer este martes, Enríquez destaca que la jerarquía de esos dioses está relacionada con la manera en que los totonacos conciben el mundo, que para ellos está formado por tres niveles que son el Cielo, la Tierra y el Inframundo.

Asegura el lingüista que «todo este patrimonio de los hablantes de totonaco, no está registrado en documentos pues ha sido preservado y transmitido vía tradición oral lo que lo hace fragmentario y subjetivo, ya que cada quien tiene su propio punto de vista» y así lo destaca en su texto publicado por el Instituto Nacional de Antropología e Historia.

El trabajo del investigador de la Dirección de Lingüística del INAH, apoyado del traductor Epifanio Hernández, está basado en una serie de entrevistas con los hablantes de la variedad dialectal conocida como totonaco de Papantla.

«La información recopilada -realizada durante tres años- se presenta casi sin modificaciones, lo que implica que hay algunas contradicciones, además la información se compara con los datos recogidos por otros investigadores en zonas cercanas a Papantla», afirma.

En su volumen señala que los dioses principales se encuentran en el Cielo y son los creadores de la naturaleza, de los animales y el hombre. La relación que tienen con el hombre es muy lejana e impersonal. Los dioses principales son el Sol, la Luna, las estrellas y el Trueno.

Dicha investigación expone que Chichiní es el dios principal, es masculino, caliente y seco, está asociado al fuego, a la luz y al color rojo; tiene poder sobre el agua y la lluvia; se le asocia con el maíz y se identifica con el Dueño de la Siembra y del Maíz y domina sobre el Dueño de la Tierra.

La luna «Papa» también se considera un dios principal, masculino y frío, vinculado con el agua, la oscuridad y el color blanco; Domina sobre las mujeres y los hechiceros, tiene relación con las mujeres y se le considera el hombre de todas ellas.

Las estrellas son vigilantes del mundo, son flechadores y su misión es evitar que revivan las piedras y los árboles. Las estrellas indican los días buenos y malos para la siembra y anuncian ciertos fenómenos naturales y catástrofes.

El volumen «La jerarquía de los dioses totonacos», será presentado este 27 de mayo a las 16:00 horas en el Auditorio Fray Bernardino de Sahagún del Museo Nacional de Antropología, señala un comunicado del INAH.