Hay se ven…

Una forma de despedida con desgano y muy común entre los jóvenes potosinos

Hay se ven…

Esta es una alusión, una forma de despedida con desgano y muy común entre los jóvenes potosinos, y así se escucha a muchos ex funcionarios de la administración estatal que ya salieron, y que consideran que cumplieron con su responsabilidad, y que “el de atrás pague”; para ellos su preocupación se centra en estos momentos con el nuevo mandatario estatal entrante, y acomodaticios algunos de ellos, se les escucha decir, “yo como sabía que iba a ganar yo voté por él”, “a pesar de que presenté mi renuncia no me van a correr, a mí me necesitan por mi experiencia”, “yo soy amigo de tal funcionario entrante”, y más, total, que se mantienen aferrados con uñas y colmillos al hueso.

Muchas viudas dejó la administración estatal saliente, con funcionarios de confianza que se laboran en varias dependencias, y ahora, pues van a tener que buscar un nuevo empleo.

Pero lo más grave, son los compromisos que dejaron pendientes el mandatario estatal y su gabinete con la ciudadanía; en materia salud, de seguridad, educación y acciones y obras que quedaron pendientes.

En materia de salud, en los peores momentos que han vivido los potosinos para curar sus enfermedades y con los efectos terribles de contagios y muerte por la pandemia del coronavirus, la ex titular de Servicios de Salud, Mónica Rangel, abandonó a su suerte esta dependencia y su responsabilidad de atender la salud y vida de los potosinos para ir a buscar la gubernatura por el partido Morena, cuando arribamos a más de 6 mil muertos y casi 100 mil contagiados de Covid-19.

Quedó pendiente la obra de Red de Transporte Público que conectaría el oriente de la ciudad con el centro, la vía de acceso del Boulevard Rocha Cordero con la carretera 57, la obra de agua potable y drenaje de Escalerillas, la presa de Las Escobas y La Maroma, de Escalerillas y Matehuala, respectivamente; la regularización de la colonia Buenos Aires en Ciudad Valles y La Margarita en esta ciudad, y más.

Muchos pendientes y estas circunstancias desfavorables de relevo de gobierno, pueden ser pretexto para que la nueva administración advierta que se quedó sin recursos y con un montón de adeudos por saldar. Ojalá que no ocurra como con la administración del doctor Fernando Toranzo, que todo su sexenio se la pasó quejando del desfalco que le dejó el ex mandatario Marcelo de los Santos Fraga y poco hizo por la entidad.

Los más afectados como siempre, serán los potosinos más vulnerables que sufren de muchos problemas y carencias, y que necesitan el apoyo de oficial para resolver sus problemas más acuciantes, entre ellos en la capital potosina, el problema de vivienda, dado el gran fenómeno migratorio a nuestra ciudad de mano de obra que viene a esta capital a laborar en la zona industrial y que necesita de un lugar donde vivir junto con su familia. Otro problema que se tiene que resolver la administración estatal de manera conjunta con los ayuntamientos de Soledad y de San Luis Potosí, es el problema del servicio de agua potable. Igual el del transporte público, el tema de salud y entrega de medicamentos.

Muchos problemas por atender tendrá el nuevo mandatario, y de quien esperan los potosinos que atienda sus más urgentes problemas. Ojalá que no se vaya con la manida y respuesta fácil de que “los gobiernos anteriores no dejaron nada”, “que no puede entrar al problema de la inseguridad por la corrupción”, “que no puede atender los problemas de salud por culpa de los gobiernos neoliberales”, y más.

Los potosinos no queremos gobernantes quejumbrosos, queremos gobernantes que vean para adelante, que vean como si se pueden resolver los problemas y se saque del atolladero a nuestra entidad. Nada más pero nada menos.