El artista visual Rivelino hurga en las huellas de la violencia

Exhibe cien piezas en la muestra ‘Víctimas y victimarios’ en la BUAP y habla sobre la escultura de la mujer indígena que llegará a Paseo de la Reforma

El artista visual Rivelino (Jalisco, 1973) informó que a finales de octubre develará una escultura permanente en el espacio público de la Ciudad de México.

Adelantó que ésta se ubicará a unos pasos de la Alameda Central y que está expectante, luego de lo ocurrido con el escultor Pedro Reyes y el retiro del conjunto escultórico de Cristóbal Colón en Paseo de la Reforma.

«Pronto voy a inaugurar una escultura permanente en la CDMX, lo cual será interesante después de lo que ha sucedido en Paseo de la Reforma”, explica en entrevista. ¿Qué puede adelantar de la obra?, se le preguntó luego de hablar sobre el montaje de Víctimas y victimarios, su más reciente conjunto de obra que se exhibe en el Museo Carolino de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP), que permanecerá hasta el 30 de agosto de 2022.

«Hace cuatro semanas que la escultura está montada, pero se develará hacia el 20 de octubre y no puedo dar más detalles, porque lo llevamos con una institución”, reconoce. Sobre Víctimas y victimarios, el artista asegura que se trata de una exploración sobre los efectos de la violencia en la memoria. La muestra, explica, se compone de tres ejes. “En el primero, aparece la inmensa violencia del ser humano hacia la naturaleza y cómo hemos acortado cada vez más el espacio natural debido a la urbanización”. En este apartado de obra, detalla, se incluyen piezas en relieve hechas de restos de árboles incinerados, los cuales fueron enmarcados en concreto.

«Estos relieves, de entre 60 y 120 kilos, son una metáfora visual, donde se muestra cómo el concreto aprisiona a la naturaleza”. El segundo bloque se compone de 60 vasijas de barro, las cuales fueron lastimadas con distintas armas cuando aún estaban crudas.

«Para ello utilicé cuchillos, picahielos, palos, piedras, golpes humanos y otras agresiones y después fueron quemadas en el horno». Esta serie aborda el efecto de la violencia en el cuerpo y en las emociones humanas.

«Me refiero al cuerpo de mujeres, niños, ancianos y hombres, es una sala que está en penumbra para que la puedas transitar en profundo silencio mientras ves el video de cómo fueron elaboradas las piezas”.

Llega la Luz

La tercera parte de la muestra está dedicada a la luz. «Es una metáfora de que al final de este recorrido de dolor y violencia, hay un momento de esperanza y luminosidad”, dice. Sin embargo, lo que más importa al final es cuestionar el efecto de la violencia en la memoria.

«Me interesa explorar cómo queda el ser humano lastimado mentalmente, debido al efecto que producen las marcas físicas, la violencia sicológica, visual y política, ya que estamos rodeados de ese espectro”, abunda.
«Toda mi obra es una especie de protesta silenciosa y en este caso la idea es provocar una reflexión desde la estética y el cuestionamiento de la marca física en la memoria”, concluye.

Escultura y polémica

Rivelino también habla de la escultura de Cristóbal Colón y la sustitución con una escultura dedicada a la mujer indígena.

«Estamos viendo un caso de lo que significa el espacio público en la CDMX. Hay muchos dueños del espacio público y entrarle no es fácil”, dijo luego de recordar la polémica que despertó su instalación urbana Raíces, en 2012. Yo sí creo que el método de selección pudo ser más afortunado”, expresa.

¿Qué opina del proyecto de Pedro Reyes? “No conocía que Pedro tuviera este tipo de obra. Sé que es un buen artista, pero su cuerpo de obra se compone de geometrizaciones y no de retrato, y creo que eso el público lo ve.”

¿Usted habría tomado el proyecto? “No lo habría hecho. Yo no hago figura humana, no hago retrato y no hubiera aceptado una propuesta tan delicada, de representar a la mujer indígena mexicana, que es algo complicado. Me lo he cuestionado, como muchos artistas, y no es fácil, menos para un público como el mexicano. Es una encomienda demasiado complicada”.