Cómo hidratar a profundidad el cabello rizado: pasos para chinos sedosos y definidos

Cómo hidratar el cabello rizado

La hidratación capilar debe ser el primer paso de cualquier tratamiento, ya que sin agua el cabello no puede absorber otros nutrientes de manera eficiente, por eso es necesario hidratarlo antes de nutrirlo y de reconstruirlo.

“El cabello rizado, por su forma y estructura, es naturalmente reseco, por lo que la hidratación es fundamental para su salud y belleza”, aseguró la fundadora de LATINA.

Durante el baño deben aplicarse productos libres de sulfatos, ya que estos arrastran los aceites naturales del pelo y resecan aún más los rizos, de preferencia con productos desarrollados especialmente para satisfacer las necesidades de cabello rizado.

El uso de acondicionador será clave, es importante el uso de un shampoo suave para el lavado del cuero cabelludo, y el acondicionador nos servirá, sobre todo, para aplicar en el largo del cabello para suavizar y desenredarlo, además de que nos ayuda a mantener la hidratación.

Entre el shampoo y el acondicionador podemos aplicar las mascarillas. La buena noticia es que el proceso es rápido y sólo necesitan 3 minutos para actuar y conseguir el efecto deseado, gracias a sus activos. Otra buena noticia es que muchas mascarillas pueden ser utilizadas también como leave-in y no necesitan enjuagarse.

De vez en cuando se aconseja hacer tratamientos profundos con las mascarillas, es decir, aplicarlas sobre cabello limpio y húmedo, déjalas reposar aproximadamente unos 20 minutos, después enjuagar y seguir con la rutina habitual de cuidado personal.

Hay que tratar de hacerlo al menos una vez a la semana (o incluso más, si el cabello está muy dañado), a fin de mantener el cabello nutrido y fuerte.

“Para obtener mejores resultados la mascarilla capilar se debe aplicar mechón por mechón, en lugar de colocarse en todo el cabello de una sola pasada, de esta forma la crema va a penetrar mejor en el cabello”, agregó Pilar García.

Como tip extra, es recomendable no enjuagar el cabello con agua caliente, ya que esto también propicia la deshidratación y daño del cabello.

Mejor enjuagar con agua tibia, “o si de plano amas bañarte con agua caliente, pasa al final un chorro de agua lo más fresca posible por los rizos para cerrar las cutículas”, recomendó la fundadora de LATINA.