
INGREDIENTES:
250 gramos de harina
150 mililitros de aceite y/o mantequilla derretida
150 gramos de azúcar (¾ taza)
250 gramos de zanahoria
4 huevos
8 gramos de polvo de hornear
2 gramos de canela en polvo
Preparación:
Para hacer esta receta de queque esponjoso, comienza pelando y cortando la zanahoria en rodajas grandes. No es necesario que sean pequeñas: el objetivo es facilitar el trabajo de la licuadora sin forzarla.
Coloca las zanahorias en el vaso de la licuadora junto con los huevos, el aceite y el azúcar y licúa a máxima velocidad hasta obtener una mezcla uniforme. Si prefieres, puedes reemplazar el aceite por mantequilla derretida; simplemente añádela mientras la licuadora está encendida.
Aparte, en un bowl, coloca los ingredientes secos previamente tamizados: harina, polvo de hornear y canela en polvo.
Vierte la mezcla de zanahoria sobre los ingredientes secos y remueve con un batidor de globo, desde el centro hacia los bordes, hasta obtener una masa homogénea y sin grumos.
Vierte la preparación en un molde de 23 cm de diámetro, previamente enmantequillado y con un disco de papel manteca en la base para facilitar el desmolde. Si el molde tiene diseño, enharínalo con cuidado y asegúrate de que no quede ningún tramo sin cubrir.
Hornea a 175 °C durante aproximadamente 45 minutos, o hasta que, al insertar un palillo en el centro, este salga completamente limpio. Una vez listo, retira del horno, deja enfriar sobre rejilla, desmolda con cuidado y a disfrutar.



