Uruguay despide a José “Pepe” Mujica con un multitudinario cortejo fúnebre

Miles de personas acompañan el recorrido del féretro del expresidente uruguayo, símbolo de la izquierda latinoamericana, rumbo al velorio público en el Palacio Legislativo.

Montevideo se volcó a las calles este miércoles para despedir a José “Pepe” Mujica, expresidente de Uruguay y figura emblemática del progresismo latinoamericano, fallecido a los 89 años. Su cortejo fúnebre partió desde la Torre Ejecutiva acompañado por una multitud que, entre aplausos y banderas, honró su memoria en un recorrido lleno de simbolismo político y afecto popular.

El féretro, cubierto con el pabellón patrio por el presidente Yamandú Orsi y acompañado por su viuda, Lucía Topolansky, fue trasladado en una cureña hasta el Palacio Legislativo, donde se instalará el velorio público. El ataúd fue escoltado por militantes del Movimiento de Participación Popular, vestidos de negro y con camisetas que evocan una de las frases más recordadas de Mujica: “No me voy, estoy llegando”.

Esa misma frase fue pronunciada por el exmandatario el 1 de marzo de 2015, al concluir su periodo presidencial. Entonces, prometió no alejarse de la lucha social y seguir comprometido con el pueblo: “Me iré con el último aliento y donde esté estaré por ti, estaré contigo, porque es la forma superior de estar con la vida”.

En su camino, el cortejo se detuvo frente a sedes emblemáticas: el Movimiento de Liberación Nacional Tupamaros, del que Mujica fue guerrillero en su juventud; el Movimiento de Participación Popular, que fundó como fuerza política; y el Frente Amplio, coalición de izquierda que lo llevó a la presidencia (2010-2015).

El velorio comenzó a las 15:00 h en el Salón de los Pasos Perdidos del Palacio Legislativo. Aunque aún no se confirma si durará 24 o 36 horas, está abierto al público general para que el pueblo uruguayo pueda rendirle homenaje.

Mujica falleció el martes tras una larga batalla contra un cáncer de esófago que se le diagnosticó en abril de 2024 y que más tarde se extendió al hígado. El presidente Orsi lo anunció con un mensaje en redes: “Te vamos a extrañar mucho, viejo querido. Gracias por todo lo que nos diste y por tu profundo amor por tu pueblo”.

El legado de Mujica —campesino, exguerrillero, presidente austero y pensador político— queda como una de las figuras más queridas y respetadas de América Latina. Su despedida multitudinaria es reflejo de un cariño que trasciende ideologías y fronteras.